El pasado sábado 17 de junio un montón de priistas se reunieron para quejarse de que la dirigencia del PRI permite corrupción y va a imponer candidato presidencial por dedazo. Se quejaron también de que con Enrique Peña Nieto no tienen apoyo en los estados contra la inseguridad.
Cito textuales las declaraciones en esa reunión del líder priista de Tamaulipas Miguel de la Rosa publicadas en Reforma:
"Hay desánimo, hay descontrol. Vamos cumpliendo un año que no hay un delegado, dicen que nadie quiere ir. Me mandan fotos de gente decapitada en Victoria, ese es el clima que estamos viviendo. La inseguridad con este señor (gobernador) del PAN está peor que antes y no vemos la fuerza de la federación, que nos eche la mano, que voltee a vernos."
En otras palabras, los priistas se quejan de que la violencia en Tamaulipas, por mencionar un ejemplo, es igual con el PRI que con el PAN. Pero se quejan de que el propio Peña Nieto no hace nada para reducir la violencia del narco, siendo que el narco es delito federal y quien se supone que lo iba a combatir con su gendarmería era Peña Nieto.
Así que si quieren que pase lo que en Tamaulipas, sigan votando por el PRIAN.
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