Ayer la sala superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación revocó la sentencia de la sala regional de ese mismo tribunal en la cual ordenaban un recuento de votos para la elección de Jefe Delegacional de Gustavo A. Madero, en la Ciudad de México, que había solicitado Morena y que el Tribunal Electoral del DF ya le había negado.
En otras palabras, la última instancia del TEPJF canceló el recuento que pidió Morena.
Y la verdad, el TEPJF tuvo razón. Simple y sencillamente la ley no contemplaba el recuento de votos en Gustavo A. Madero. Mire usted:
Gustavo A. Madero fue una de las delegaciones que Morena perdió. En este caso en particular, Morena perdió por menos de uno por ciento del resultado contra el PRD.
Morena pidió entonces un recuento al Tribunal Electoral del DF, pero el TEDF le negó el recuento debido a que la ley electoral local del DF (esta es una elección local y por lo tanto aplica la ley local) no contempla recuentos totales y Morena sólo pudo presentar evidencia de irregularidades en 18 casillas, lo cual no ameritaba recuento del resto de las casillas.
Por consiguiente, el TEDF ordenó anular las 18 casillas en las cuales Morena pudo demostrar que hubo irregularidades (las irregularidades consistían en que en esas 18 casillas los funcionarios no estaban autorizados para recibirlas o había error en los cómputos de votos), pero hasta ahí.
Anular esas 18 casillas no cambió el resultado; siguió ganando el PRD. Y en el resto de las casillas no había evidencia de ni de mal manejo de los votos ni de errores en los cómputos.
Por consiguiente, el TEDF declaró válido el triunfo del PRD en GAM.
Morena se inconformó e impugnó ante la sala regional del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.
Las salas regionales son la primeras instancias en donde se puede impugnar ante el Tribunal Electoral Federal y las quejas son revisadas por tres magistrados.
El magistrado que hizo el proyecto de sentencia propuso confirmar la sentencia del TEDF y no concederle a Morena el recuento en GAM debido a tres razones:
1. Que Morena no solicitó explícitamente el recuento total de votos (lo que hizo fue impugnar el fallo del TEDF).
2. Que la ley electoral del DF no contempla recuentos totales, sino parciales.
3. Que Morena no comprobó que hubiera violaciones a la ley en las casillas que no fueron anuladas.
Pero a los otros dos magistrados no les pareció el proyecto y lo rechazaron, ordenando además el recuento alegando que si bien la norma del DF no contempla el recuento total de votos, se debe garantizar los derechos constitucionales que alega Morena.
Es decir, algo parecido a la justificación que dio el Tribunal Electoral para aceptar que Xóchitl Gálvez pudiera ser candidata a Jefa Delegacional de Miguel Hidalgo a pesar de que no tenía un IFE del DF y la ley lo exigía.
El recuento estaba ordenado para ocurrir el 19 de septiembre, pero el PRD impugnó la sentencia de la sala regional ante la sala superior del TEPJF. Es decir, el PRD apeló a la última instancia.
En la sala superior, los magistrados revocaron la sentencia de la sala regional por las siguientes razones:
1. Morena no presentó evidencias más allá de la simple diferencia de menos de 1% entre el primero y el segundo lugar, para pedir el recuento.
2. Al no existir una duda fundada sobre la certeza de los resultados de la elección, no puede haber un recuento.
"¡Pero la ley dice que si la diferencia es menor a 1% tiene que haber recuento!" dirán algunos.
Sí, pero para elecciones federales. No para elecciones locales. Las elecciones locales se rigen por el código electoral local, no por la LEGIPE.
La ley electoral federal, además, es muy clara en sus causales para pedir recuento de votos. Dice en el artíclo 311 fracción 2:
Cuando exista indicio de que la diferencia entre el candidato presunto ganador de la elección en el distito y el que haya obtenido el segundo lygar en votación es igual o menor a un punto porcentual, y al inicio de la sesión exista petición expresa del representante del partido que postuló al segundo de los candidatos antes señalados, el consejo distrital deberá realizar el recuento de votos en la totalidad de las casillas. Para estos efecos se considerará indicio suficiente la presentación ante el Consejo de la sumatoria de resultados por partido consignados en la copia de las actas de escrutinio y cómpuro de casilla de todo el distrito.
La ley se refiere a recuentos en distritos electorales en elecciones federales. No se refiere ni a elecciones municipales ni a elecciones estatales. Aún así, las reglas para pedir un recuento distrital son las siguientes:
1. Si existe indicio de que el la diferencia entre el primero y el segundo lugar es igual o menor al 1%.
2. Si el partido que quedó en segundo lugar pide expresamente el recuento de votos. En otras palabras, no ocurre en automático.
Sin embargo, los tribunales electorales pueden considerar ordenar recuentos de casillas en elecciones locales si se presenta evidencia de que hay irregularidades en las casillas o en las sumas y restas de los votos.
El detalle es que en el caso de GAM, Morena nunca presentó evidencia de que hubiera irregularidades en todas las casillas. Morena sólo pudo sustentar quejas por irregularidades en 18 casillas. Y todas esas casillas fueron anuladas.
Pero como ni así ganaba Morena, entonces pidió el recuento del resto de las casillas simplemente porque el resultado entre el primero y el segundo lugar era menor a 1% de la votación.
El problema es que ninguna ley dice que se debe ordenar un recuento total de casillas en una elección local simplemente por la diferencia de menos de 1% en el resultado. Y mucho menos si no hay evidencia de irregularidades.
¿Por qué tendría que haber entonces un recuento en GAM si no existía evidencia de que las sumas y restas no cuadraran (como pasó en 2006) o si no había evidencia de mal manejo de las casillas? ¿Nadamás por capricho de Morena?
Lo que Morena demostró con el berrinche que hizo en GAM fue que lo único que busca es el poder por el poder. No le importó que no hubiera evidencias de irregularidades. Ellos querían un recuento a la fuerza para ver si así lograban apoderarse de GAM y presumir "mayoría" de delegaciones en el DF. Es decir, lo único que les interesaba era hacerse propaganda y alegar ser una mayoría cuando nunca lo fueron y a nivel nacional apenas rayaron el 9% del voto, mientras que el PRD tuvo más votos que Morena tanto a nivel nacional como para sus candidatos a Jefes Delegacionales.
Y ahora a ver con qué pataleta salen en Morena, ya que esta revocación del recuento fue en la última instancia y ya no es impugnable.
Supongo que dirán que el rechazo al recuento confirma que "ganaron" y bembadas por el estilo. Pero la realidad es que no hay evidencia de que hubieran tenido más votos en GAM que el PRD. Ni hay evidencias de irregularidades.
Va a estar interesante lo que ocurrirá en 2018, eso sí. Como Morena ya quemó buena parte de su voto presidencial en 2015, en 2018 tendrá menos posibilidad de crecimiento que el PRD.
Siendo el caso, Morena perderá de nuevo en GAM y por un margen más grande.
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