Por Victor Hernández
Ayer estuvo circulando en México la versión de que el gobierno de Estados Unidos solicitaría un panel para resolver una disputa con México por la ley eléctrica que le da prioridad a CFE en el sector energético.
Curiosamente, del asunto no se dijo nada en los medios de Estados Unidos. Sólo se hizo circo en redes sociales en México. Vaya, la Casa Blanca declinó comentar cuando les preguntó Bloomberg y Reuters al respecto.
En la derecha, desde luego, aplaudieron a esta acción del gobierno de Estados Unidos. Lo hicieron porque son traidores a la patria. Se comportan igual que los conservadores aplaudiéndole a Maximiliano.
Pero la pregunta es; ¿y qué significa eso de que EU busca un panel contra México? En realidad no significa nada. La queja es de chocolate. Y podría terminar siendo un tiro en el pie para Estados Unidos si de verdad siguen con el circo. Mire usted:
Para empezar lo que está pidiendo el gobierno de Estados Unidos es una consulta con México para resolver lo que Estados Unidos ve como un agravio a las empresas privadas de energía de EU al no dejarles tener más prioridad que CFE. México tiene 30 días para responder a la consulta.
Si México no responde, y pasan 75 días, entonces Estados Unidos puede solicitar un panel formal dentro del tratado de libre comercio para resolver la disputa.
Y si después de ese panel México no acepta los caprichos de Estados Unidos, entonces EU puede imponer aranceles a México.
Nadamás que aquí Estados Unidos lleva la de perder por tres razones:
1. Porque están a 3 meses y medio de las elecciones intermedias. Si el gobierno de Biden le enfada las bolas a los votantes mexicanos, los Demócratas van a perder votos. Si pierden votos, Biden pierde el control del congreso y prácticamente se acabó si presidencia.
2. Porque si Estados Unidos impone aranceles a productos hechos en México, lo único que va a lograr es aumentar la inflación aún más en ese país, lo cual le pegará duro a los Demócratas en las elecciones presidenciales. Para que se den una idea del tamaño del tiro en el pie que se daría EU poniendo aranceles a productos hechos en México, consideren el hecho de que el haber frenado camiones mexicanos en la frontera le costó a Texas miles de millones de dólares. Ni Trump se atrevió a ponerle aranceles a productos mexicanos porque sus asesores sabían que sería un desastre para la economía de EU.
3. Porque al final las empresas afectadas con aranceles no son mexicanas, sino americanas. Las automotrices, por ejemplo, le retirarían el apoyo a Biden si les ponen aranceles. Lo mismo otras industrias que no tienen nada que ver con el sector energético. Lo único que lograría Biden sería poner a los empresarios de Estados Unidos en su contra.
Así que si se ponen a las patadas, el que lleva la de perder es Estados Unidos, que manufactura sus productos en México e importa comida de México. Las maquiladoras seguirían produciendo en México sin problema. Y como el que pondría aranceles es Estados Unidos, el afectado en realidad sería EU, no México.
En todo caso México podría ponerle aranceles a productos específicos para pegarle a partes de Estados Unidos donde los Demócratas necesitan votos. De nuevo, quien llevaría la de perder sería EU, no México.
Como dije al principio, los que están cacareando la controversia de Estados Unidos son los derechangos. Lo hacen porque son traidores a la patria. Que no se quejen entonces cuando se les llame así por aplaudir a una agresión injustificada de Estados Unidos contra México.
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