Por Victor Hernández
A la derecha mexicana no le gustó que Marcelo Ebrard anunciara que México interpuso una demanda contra los fabricantes de armas en Estados Unidos, reclamando por las víctimas de violencia con armas traficadas ilegalmente a México, porque saben que eso generará simpatías con Ebrard en Estados Unidos.
Así que para tratar de joder a Ebrard y al gobierno de López Obrador, la derecha ha estado diciendo que la demanda es una ridiculez que no va a prosperar porque en ese país está protegido por la constitución el derecho a portar armas.
Pero como la derecha es ignorante, y no sabe ni la historia ni las leyes de Estados Unidos, en esta columna vamos a demostrar por qué la demanda sí tiene posibilidad de prosperar.
Para empezar hay que decir que la demanda no será fácil de ganar, pero tampoco es imposible.
No será fácil porque, en efecto, en Estados Unidos la segunda enmienda de su constitución garantiza el derecho a portar armas. Eso le puede servir de pretexto a jueces federales para desestimar la demanda.
Sin embargo, existe una ley federal que obliga a los fabricante y vendedores de armas a investigar a los compradores antes de venderles. Si no los investigan cometen un delito federal. La única excepción a esta ley es la venta de armas en ferias de armamento, pero nadie se abastece de arcenales de armas para el narco en este tipo de ferias.
Otro hueco en la ley es la compra de armas por internet, que tampoco requiere de una investigación al comprador. Sin embargo, inclusive así la demanda contra los fabricantes de armas sí tiene una fuerte posibilidad de prosperar debido a algo que la derecha claramente ignora: Las demandas contra las industrias tabacaleras y farmacéuticas en Estados Unidos.
La industria tabacalera ha sido demandada múltiples veces en Estados Unidos por personas que padecieron daños a su salud por consumir tabaco.
Las demandas contra las tabacaleras iniciaron en la década de los 1950s y empezaron a ganarse en los 1990s. Los demandantes reclamaron que las tabacaleras sabían que sus productos eran dañinos para la salud y de todos modos los vendían.
Vaya, llegó un punto en el que hasta los estados de EU y su gobierno federal demandaron a las tabacaleras.
Las demandas contra las tabacaleras han sido tan exitosas en años recientes que en 2015 tres tabacaleras pagaron más de 100 millones de dólares para que les retiraran cientos de demandas federales de víctimas de tabaquismo.
Con las farmacéuticas han pasado casos similares. A Johnson & Johnson los han demandado varias veces por daños a la salud causados por su talco para bebé. En 2020, Johnson & Johnson aceptó pagar 100 millones de dólares para reparar miles de demandas por uso de su talco.
No sólo eso. Este año la Suprema Corte de Estados Unidos rechazó una apelación de Johnson & Johnson a un veredicto que los obliga a pagar 2 mil millones de dólares por demandas reclamando el hecho de que el talco de Johnson & Johnson causa cáncer.
Ahí no acaba la cosa. A la farmacéutica Purdue Pharma la demandaron 15 estados de Estados Unidos por haber causado aducción a su opioide Oxycontin, que es esencialmente heroína en pastillas. La farmacéutica aceptó un arreglo de 4 mil 500 millones de dólares como parte del arreglo con los estados. En el caso de Purdue, como resultado de las demandas de plano dejaron de promover el uso de opioides porque causó una epidemia de adicciones en Estados Unidos.
Ahora bien; tomó 40 años para que prosperaran las demadas contra las tabacaleras, pero ocurrió. Tomó años también demandar a las farmacéuticas, pero se logró.
En el caso de la industria armamentista nadie se había atrevido a demandarlos en Estados Unidos porque puede tener costos electorales en ese país. Pero como México no tiene ese problema, no tiene ningún problema para demandar a las empresas armamentistas.
¿Tomará tiempo y esfuerzo ganar esa demanda? Sí. Por supuesto. Pero si no se hace, nunca ocurrirá.
Y si como resultado de la demanda de México las armerías dejan de venderle armas a los narcos mexicanos, la violencia en México disminuirá. Eso vale la pena pelearse en la corte.
PD: El pendejo de Gabriel Quadri dijo que es una ridiculez demandar a las empresas armamentistas porque entonces hay que demandar a las aotomotrices porque se pueden usar autos para delinquir. Lo cual es una estupidez debido a que los autos no están diseñados para matar. Están diseñados para transportar. Las armas tienen como único propósito matar. Así que la comparación es falaz. Si ese es el mejor cartucho que tiene la derecha, realmente van a valer cagada en las urnas en 2024.
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