Fue muy revelador lo que dijo el pasado 1 de mayo el Secretario de Comercio de Donald Trump, Wilbur Ross, respecto a las elecciones de 2018 en México: Que Trump no pretende salirse del Tratado de Libre Comercio, sino que pretende renegociarlo, pero que las elecciones de 2018 en México podrían un ser un "obstáculo" para la renegociación.
"La clave para el calendario (de renegociación del TLC) son las elecciones en México el próximo año, las elecciones presidenciales. Cuanto más nos acerquemos a la elección, será más difícil lograr algo. En ese sentido se parecen a la situación en Estados Unidos, entre más se acerca una elección presidencial, es más difícil aprobar algo", dijo Ross de acuerdo con Reuters.
Eso significa que la renegociación que pretende Trump pondría a México en desventaja, y que tanto el PRI como el PAN lo saben.
"¡Nosierto! ¡Ni mencionó al PRI ni al PAN!" dirán los PRIANistas. Pues han de ser muy bueyes entonces como para no darse cuenta de que si México no estuviera dispuesto a aprobar cambios al TLC es porque pondrían a México en desventaja.
Y si los cambios que quiere Trump pondrían a México en desventaja, pero sí podrían aprobarse antes de las elecciones, quiere decir entonces que Trump sabe que el PRI y el PAN se le pondrían de tapetes y que esos dos partidos sí estarían dispuestos a aprobar cambios al TLC que perjudiquen a México.
Después de las elecciones de 2018 el PRI y el PAN también estarían dispuestos a aprobar cambios al TLC que perjudiquen a México, pero Andrés Manuel López Obrador no. ESA es la razón por la cual el gobierno de Donald Trump preferiría que quedara otra vez el PAN o el PRI.
El detalle es que Trump es tan inepto que no ha logrado que le aprueben lo que quiere ni en Estados Unidos.
Es muy revelador, eso sí, que la administración de Trump de a atender que el PRI y el PAN serían sus tapetes con el TLC.
De ahí que a quien realmente le conviene a México que sea presidente en 2018 es Andrés Manuel López Obrador. Él sí se opondría a Trump, no como Margarita Zavala que ya fue a lambisconearla al partido Republicano, el de Trump.
Y no; Trump no se va a salir del TLC. Ni en su partido se lo permitirían.
UPDATE: Como se colapsó el Trumpcare en el Senado de EU, ahora a Trump sólo le quedan dos opciones para no hacer el ridículo luego de que prometió que quitaría al Obamacare: o le aprueban reducirle los impuestos a los ricos, o le aprueban dinero para el muro fronterizo. Lo de los impuestos no se lo van a aprobar. Y el muro tampoco. Lo cual quiere decir que a Trump sólo le quedará una opción para no quedar en ridículo por no cumplir ninguna de sus deschavetadas promesas de campaña: mano dura con el TLC, lo cual afectaría a México.
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