lunes, 23 de junio de 2014

PRI-DF queda en manos de gente de Osorio Chong y Cuauhtémoc Gutiérrez pero excluyen a mujeres

Por Victor Hernández

La solución de Enrique Peña Nieto para tratar de lavarle la cara al PRI-DF tras el escándalo de prostitución de Cuauhtémoc GUtiérrez fue imponer como nuevo dirigente del PRI capitalino -por dedazo disfrazado de candidatura única- a Mauricio López, achichincle de Miguel Ángel Osorio Chong.

Y la secretaría general del PRI-DF, también por dedazo disfrazado de candidatura única, quedó en manos de Tonatiuh González, quien es achichincle de ¡Cuauhtémoc Gutiérrez!

El arreglo tiene el mismo objetivo que la gubernatura de facto de Alfredo Castillo en Michoacán: controlar directamente al partido desde Los Pinos, pero sin quitarle poder a Cuauhtémoc Gutiérrez, literlamente valiéndole madre a Enrique Peña Nieto las tropelías de Gutiérrez contra las mujeres que fueron sus víctimas con dinero público.

Las mujeres, mientras tanto, quedaron marginadas en el Club de Tobi en el que se convirtió el PRI-DF.

De acuerdo con El Universal, el Frente de Mujeres Priistas del DF se inconformó por el hecho de que en la nueva dirigencia del PRI-DF no se tomó en cuenta a las mujeres priístas.

Y es que en la mesa del presídium de los nombramientos en el PRI-DF, estuvieron 45 priístas hombres y sólo cuatro mujeres.

Según las mujeres priistas, no se cumplió con la "encomienda" de Peña Nieto de que se diera valor y voz a las mujeres. Lo cual realmente suena ingénuo. Como si en el PRI la gente no hiciera caso de la línea que se da en Los Pinos.

Más bien a las mujeres priistas se las chamaquearon, ofreciéndoles más representación en el partido tras el escándalo de Gutiérrez, tan sólo para que a la mera hora les dieran una patada por el trasero y dejaran a la gente de Cuauhtémoc Gutiérrez a cargo del PRI-DF.

Sugerencia a las mujeres priistas: sálganse del PRI o sabotéenlo desde adentro en 2015 en desquite. Si en el PRI les quieren jugar chueco, pues juéguenle chueco al PRI entonces.

Eso sí; es muy gracioso que las priistas de verdad pensaran que en el PRI cumplen lo que prometen para las mujeres teniendo a Peña Nieto en Los Pinos, cuya frase "no soy la señora de la casa", pinto de cuerpo completo a su misoginia.

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