De acuerdo con Reforma, Enrique Peña Nieto asistió a un evento del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE, el que sigue siendo gordillista en espíritu), para decirle a los maestros que "hagan suya" la reforma educativa.
A cambio, el gobierno federal priista absorberá las deudas de los agremiados del SNTE con un fondo de 5 mil millones de pesos para pagarles a sus acreedores, a quienes les llegan a pagar hasta el 50% de sus quincenas.
De esa forma, el SNTE ya no le pagará a quienes les debía dinero, sino al gobierno federal con intereses más bajos.
En otras palabras, Peña Nieto se maiceó al SNTE con 5 mil millones del pesos del erario para pagar sus deudas a cambio de que no se la hagan de tos con la reforma educativa.
Peor; el erario va a perder dinero en deudas del SNTE al cobrar menos intereses.
¿Exactamente cómo le beneficia eso a la educación? Sepa. Pero sí le beneficia a Peña Nieto, quien de esa manera compra las lealtades del SNTE con esta nueva versión de la tarjeta Soriana.
El problema es que quien paga por eso es el contribuyente que paga impuestos y que va a tener que pagar por aumentos de impuestos en 2014.
Ahí tienen los grandes "beneficios" de la reforma educativa: usted le paga sus deudas al SNTE, pero la educación sigue igual y con los mismos líderes charros.
¿Ven por qué se queja la CNTE, que es la disidencia del magisterio?
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