En campaña presidencial, Enrique Peña Nieto prometió que los mexicanos ganarían más.
Mintió. Los salarios no han aumentado más que la inflación.
También prometió que bajaría el precio de la gasolina. Y también mintió, ya que el primero gasolinazo con Peña Nieto fue de 11 centavos, 2 centavos más que los gasolinazos de Felipe Calderón.
Bueno, pues ayer, de acuerdo con Reforma, en el Congreso se propuso un punto de acuerdo para acusar a Peña Nieto de incumplir con su promesa de campaña de la gasolina y para que la secretaría de Hacienda de una explicación por el alza del precio del combustible.
Pero el punto de acuerdo fue rechazado por un mayoriteo del PRI.
Eso quiere decir que mientras el PRI tenga mayoría en el poder legislativo, cualquier cuestionamiento a Peña Nieto o al PRI será bloqueado aunque esté absolutamente justificado.
Hay remedio para esto: No volver a votar ni por el PRI ni por el PAN, sino por la izquierda.
Hay oportunidad para sacar al PRI del poder este año en 14 estados y en 2015 a nivel federal.
Porque sólo sin mayoría legislativa el PRI la va a tener que pensar dos veces si quiere perjudicar al país como lo ha hecho hasta el momento.
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