Por Victor Hernández
Ayer a las 15:30 horas el sitio del diario El Universal publicó una nota con "7 datos de Baker Hughes" la empresa cuyo directivo aparece como dueño de una casa en la que vivieron José Ramón López Beltrán y su esposa, Carolyn Adamas, durante más o menos un año, en lo que Adams terminaba de construir su casa en Houston.
Pero El Universal, aparentemente de manera deliberada, omitió mencionar un dato que dimos a conocer horas antes den blogdeizquierda.com y que respaldamos con documentos del Diario Oficial de la Federación: Baker Hughes era contratista del gobierno de Enrique Peña Nieto.
Lo que publicó El Universal no tiene fechas. Sólo dice que tiene contratos vigentes con Pemex por 151 millones de dólares y que Rocío Nahle se reunió con sus directivos el año pasado.
Pero lo que no dijeron es que Baker Hughes tuvo contratos con Pemex por lo menos desde octubre de 2013, en la administración PRIANista Peña Nieto. Esto, como dije, está demostrado con documentos del Diario Oficial de la Federación del 10 de octubre de 2013. Los contratos se habrían firmado el 2 de octubre de ese año.
El Universal sabía esto no sólo porque cualquiera puede encontrar este documento en Google, sino porque se sabía desde las 7 de la mañana de ayer (¿creen de verdad que no nos leen?).
La omisión de El Universal, por lo tanto, sólo puede indicar una cosa; que el diario de Juan Francisco Ealy Ortiz, compadre de Humberto Moreira, buscaba hacer guerra sucia ocultándole a sus lectores que Baker Hughes era contratista con Peña Nieto, y que por lo tanto no había manera de que el asunto de la casa de Carolyn Adams fuera siquiera remotamente similar al caso de la casa blanca de Peña Nieto, que sí fue resultado de corrupción y tráfico de influencias con una empresa que no era contratista del gobierno federal, sino de un amigo de Peña Nieto.
Llama la atención que a la derecha le urja tanto promover lo de la casa de Carolyn Adams a pesar de que el asunto es lo que en Estados Unidos llaman una "nothing burger", una "hamburguesa de nada". Tan no hay nada noticioso ni de interés público en el tema de la casa de Carolyn Adams que ningún medio importante en Estados Unidos lo retomó.
¿Por qué entonces están en la derecha tan empecinados en promover esta nothing burger? Hay, en efecto, una razón por la cual a la derecha le urge desesperadamente tratar de hacer escándalo con eso a pesar de que es una volada, pero esa historia la daremos a conocer mañana.
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