lunes, 23 de noviembre de 2020

Vean: Cronología; @lopezobrador_ se negó a felicitar a Biden al día siguiente de que Trump le ofreció impunidad para Cienfuegos

 Por Victor Hernández

De acuerdo con Reuters, fue el Procurador de Justicia de Estados Unidos, Bill Barr, quien propuso retirarle los cargos a Salvador Cienfuegos. Barr lo habría hecho, de acuerdo con esa versión, en una llamada telefónica con el gobierno de Andrés Manuel López Obrador el 6 de noviembre pasado, 3 días después de las elecciones presidenciales de Estados Unidos y justo cuando ya era clarísimo que Biden ganaría la elección.

Raro. En ese entonces Trump tenía a toda su gente metida en ver cómo impedían el triunfo de Biden en las urnas. ¿Qué necesidad tenía Barr, quien es uno de los achichincles más lacayunos de Trump, en ofrecerle a México retirarle los cargos a Cienfuegos?

Al día siguiente de la llamada de Barr, el sábado 7 de noviembre, Andrés Manuel López Obrador declaró que no felicitaría a Joe Biden.

“No queremos ser imprudentes, no queremos actuar a la ligera y queremos ser respetuosos de la autodeterminación de los pueblos y del derecho ajeno”, habría dicho AMLO desde Tabasco.

Si la llamada de Barr se dio el 6 de noviembre, la declaración de AMLO al día siguiente dejaría claro que su negativa sí fue un cambalache político; No reconocer a Biden a cambio de que soltaran a Cienfuegos. 

El cambalache en nada le beneficiaba a México. El único beneficiado era la élite militar mexicana, que estaba molesta porque Estados Unidos había detenido a uno de sus integrantes por narco. Siendo Jefe Supremo de las Fuerzas Armadas, AMLO simplemente tenía que haber dado un manotazo para cuadrar a la élite militar y punto. Pero no; accedió a la propuesta del gobierno de Trump, quien en ese momento no buscaba atrapar a ningún capo (no tenía sentido, ya que Trump se iba en 2 meses de todos modos), sino hacer todo lo posible para cumplirle el capricho a Trump de que no se reconoceria el triunfo de Joe Biden.

Eso de que era un asunto de "prudencia" era falso. Como también era falso que se tratara de un asunto de "soberanía". Si las fechas que publica Reuters son correctas, la declaración de AMLO fue lacayuna y claramente un pago de favores políticos que no beneficiaron en lo absoluto a México, sino a los caprichos de Donald Trump.

Ya lo hemos dicho antes en esta columna, pero lo tenemos que volver a decir: Salvador Cienfuegos tendrá absoluta impunidad. En estos momentos no está en prisión. Ni estará. Inclusive si un juez mexicano aceptara las pruebas de Estados Unidos--que es de dudarse--no pisaría la cárcel por el simple hecho de tener más de 70 años de edad.

López Obrador le debe una explicación al pueblo de México por lo que hizo con el caso Cienfuegos. Fue bochornoso, de pena ajena y una vergüenza para todos los mexicanos. Y lo pretendió disfrazar de un asunto de "soberanía" cuando su gobierno NUNCA investigó a Cienfuegos. ¿Cuál soberanía entonces? ¿Cómo va a ser soberanía si AMLO accedió a un capricho político de Trump sin ningún beneficio para México?

Y encima los lambiscones y borregos de la 4T lo solaparon.

El problema es que esto no se le va a olvidar a nadie. Y muchos de los que votaron por AMLO en 2018 no querrán votar por su partido en 2021 en rechazo al caso Cienfuegos y otros errores que la administración de López Obrador no ha querido reconocer ni corregir.

Lo cual no me alegra; me preocupa. Y mucho. Porque ni los lambiscones de la 4T lograron quitarle esta mancha. No ante la derecha PRIANista, que de hecho aplaudió la impunidad a Cienfuegos, sino ante los propios seguidores de Andrés Manuel López Obrador que hoy ya ven con mucha desconfianza lo que hizo.

Así de serio es esto.



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