No siempre estoy de acuerdo con lo que tuitea Miguel Torruco, próximo secretario de Turismo de Andrés Manuel López Obrador. Pero realmente me sorprendió que Pascal Beltrán del Río, empleado de Grupo Imagen, atacara a Torruco por tuitear esto:
Para el presidente electo López Obrador el turismo es una herramienta de reconciliación social; no podemos seguir con desarrollos turísticos de lujo conviviendo con infiernos de marginación, llegó la hora de beneficiar con infraestructura, escuelas y hospitales a la población local
Según Pascal Beltrán del Río, conocido por su rabioso antipejismo, no se debe cambiar las condiciones de marginación en las que están los lujosos complejos turísticos. Dijo Beltrán:
Que en las zonas turísticas del país coinciden complejos hoteleros de lujo con zonas de marginación, no cabe la menor duda. Pero no entiendo cómo dejar de construir aquéllos va a cambiar las condiciones de vida en éstas.
O sea que Beltrán, al parecer, no sabe leer. Torruco nunca dijo que no se deberían construir lujosos complejos turísticos. Dijo que no puede seguir habiendo marginación conviviendo con desarrollos turísticos de lujo, y que la manera de beneficiar a la población local es con infraestructura, escuelas y hospitales.
Es decir, lo que NO HAY en las lujosas zonas turísticas del país.
Y Torruco tiene razón. Dese usted una vuelta por destinos turísticos nacionales como Los Cabos, Cancún o Huatulco, hemos visto con nuestros propios ojos que hay hoteles de lujo, restaurantes de lujo, tiendas de lujo, pero también mucha pobreza, pocas escuelas, menos universidades (más que de turismo).
A mi me tocó verlo con mis propios ojos en la Riviera Maya, en Los Cabos y en Huatulco. Hay muchos hoteles de lujo, pero también hay mucha pobreza. Y ninguno de los gobiernos de derecha que ha tenido el país se ha interesado en desarrollar infraestructura, escuelas y hospitales para atender a la gente pobre.
¿Por qué le molesta entonces a Grupo Imagen, vía su achichincle Pascal Beltrán del Rio, que AMLO tenga una política de turismo enfocada a beneficiar a la gente pobre?
Una de dos: o Pascal realmente es así de pendejo y no entendió lo que escribió Torruco, o Pascal sabe que muchos derechistas son empresarios hoteleros que se pueden dar el lujo de pagar sueldos bajos por las condiciones de extrema pobreza que hay alrededor de sus complejos turísticos.
Curioso, eso sí, el título de la columna de Beltrán: "¿Y si al turismo mejor lo dejan como está?" Con ese título, Beltrán revela lo que realmente quiere la derecha: que el país no cambie y que sus privilegios sigan intocables.
PD: Dije que no siempre estoy de acuerdo con lo que dice Torruco y a las pruebas me remito. El pasado 18 de Septiembre Torruco dijo:
👉El gasto medio de los turistas presentó un decremento de 2.5% al pasar de 516.9 dólares a 503.8 dólares, de enero a julio de 2018, de acuerdo con cifras del Banco de México. Urge crear e integrar el producto turístico para lograr más derrama y beneficio a la población local👈
— MiguelTorrucoMarqués (@TorrucoTurismo) September 18, 2018
No aclaró Torruco si el gasto promedio de los turistas bajó porque gastaron menos o por la devaluación, o por la crisis económica que está causando la guerra comercial de Trump con medio mundo. Porque si ese es el problema de fondo, entonces hacer más vistosa la oferta turística no se va a traducir en un mayor gasto promedio por turista.
Yo la verdad lo que le recomendaría a Don Miguel es que empiece a plantear seriamente la legalización de la mariguana con fines recreativos como atractivo turístico. Si Amsterdam puede, ¿por qué México no?
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