lunes, 18 de diciembre de 2017

¿Cuántas marranadas le va a tolerar la izquierda a @lopezobrador_ en nombre de "ganarle a la mafia del poder"?

Por Victor Hernández

Andrés Manuel López Obrador está llegando al punto en el que pretende justificar cualquier cosa altamente cuestionable que hace alegando que es para "ganarle a la mafia del poder."

No es nuevo. Lo empezó a hacer desde hace un par de años, cuando militantes de Morena en distintos lugares de la Repúbica lo increparon en protesta por las imposiciones de dirigentes estatales y candidatos por dedazo. El comentario de AMLO siempre fue el mismo: los que se quejan y protestan por las imposiciones y nula democracia en Morena "le ayudan a nuestros adversarios."

Muchos en Morena lo toleraron por puro fanatismo y borreguez. "AMLO es mi líder y lo que él diga yo obedezco," fue siempre la justificación palabras más palabras menos.

Y en la mente de muchos de los borregofans de Morena esa obediencia ciega que tanto pregonaba el Yunque ("el que obedece no se equivoca", rezaba la letanía del Yunque) era justificable porque alegaban que quienes protestaban por las imposiciones y dedazos sólo buscaban hueso. Debatible, ya que no había manera de probarlo sin una elección para definir a un candidato.

Ante la postura pusilánime de AMLO sobre el aborto y el matrimonio gay, los borregos de Morena también se callaron la boca. AMLO literalmente pidió que se pusieran a consulta los derechos civiles de terceros para no comprometerse y que no lo vieran feo los fanáticos religiosos, pero sus borregofans nada dijeron nada a pesar de que siempre se han puesto muy machitos a criticar a la iglesia católica y al Yunque.

Otras pifias, como la tómbola para elegir candidatos para plurinominales, también recibieron la obediente aceptación de los borregofans de Morena. Y cuando legisladores que salieron de tómbola resultaron fichitas, tampoco se quejaron ni exigieron se frenara esa práctica en Morena.

A eso le siguió la incorporación a Morena de personajes de derecha sumamente cuestionables al círculo cercano de AMLO, como Esteban Moctezuma, quien promoviera la reforma energética. De nuevo silencio obediente de los borregofans de Morena. Y los que se sí se quejaron lo hicieron nadamás de dientes para afuera, haciendo como que se quejaban pero sin que realmente afectara a la decisión de López Obrador.

Luego siguió la alianza con el PES, partido de ultraderecha yunquista que ha promovido la homofobia, la prohibición al matrimonio gay y al aborto, y ha votado TODO con el PRI, incluyendo la Ley de Seguridad Interior que militariza al país. Peor; hicieron alianza con el PES luego de que AMLO se negó a hacer alianza con el PRD, partido que también ha sido palero de la derecha, pero que le representaba más votos que el PES.

Con esa decisión decisión de hacer alianza con el PES hubo algunos cuestionamientos de moneros, artistas y escritores de derecha, pero casi casi en voz baja y que se notara lo menos posible. ¿La respuesta de AMLO? Que la alianza con el PES es para ganarle a la mafia del poder.

Peor: pidió en un mitin de fanáticos de Morena en Tlalpan que "votaran" a mano alzada si querían la alianza con el PES. Como si unos acarreados fanatizados a un mitin de AMLO en Tlalpan representaran a todo el país. Obviamente la "mayoría" alzó la mano. Y en redes sociales no faltaron los borregofans que justificaron la alianza con el PES a pesar de que en 2006 se quejaban del Yunque en el poder con Felipe Calderón.

Luego de anunciar la alianza con el PES, AMLO anunció a un posible gabinete plagado de derechistas y nombramientos altamente cuestionables: Olga Sánchez Cordero para Segob, quien tuvo conflictos de intereses al ser asesora de Banorte, y quien además le dio impunidad a Mario Marín por el caso Lydia Cacho; Esteban Moctezuma para SEP luego de haber sido parte de la estructura de TV Azteca; Irma Sandoval en Función Pública a pesar de que la convertiría en una especie de "fiscal carnala" anticorrupción por ser exactamente lo mismo que Virgilio Andrade: amiguis del gobierno en turno; Rocío Nahle en Sener con sus antecedentes de corrupción al pretender hacer arreglos en lo oscurito con el PRI; O Luis Alcalde, cuyo principal mérito es ser hija de Bertha Luján, cercanísima a AMLO.

Aquí de plano hubo mutis entre los borregos de Morena. El gabinete de AMLO estaba diseñado para gustarle a la derecha, pero los borregofans no dijeron nada. De nuevo: todo sea en nombre de "ganarle a la mafia del poder", aunque integrantes de la mafia del poder estuvieran en el gabinete de AMLO.

Con lo cual uno tiene forzosamente que preguntarse; ¿Qué más le van a tolerar a AMLO en nombre de "ganarle a la mafia del poder"? Porque así como están las cosas, AMLO ya incurrió en lo que él mismo tachaba como "dejar trozos de dignidad en el camino." Y lo hizo con la completa comodidad de saber que sus borregofans le aguantarían cualquier chingadera.

Y ese es precisamente el problema. ¿Cuántas cochinadas más le va a tolerar la izquierda al Peje en nombre de "ganarle a la mafia del poder"? ¿Qué más le van a aceptar? ¿Más priístas en el gobierno federal? ¿Control de estados y municipios por grupos caciquiles como la mafia de los Monreal? ¿Raterías en Pemex orquestadas por Rocío Nahle? ¿Hasta dónde es el límite?

Yo no le voy a tolerar esas cochinadas a AMLO. No sólo lo voy a decir publicamente, sino que además voy a anular mi voto si no veo que AMLO rectifique de verdad las cochinadas que ha estado haciendo con tal de ganar las elecciones. Se equivocan en Morena si creen que tienen el voto de muchos votantes de izquierda sólo porque se trata de AMLO. Muchos lo hemos apoyado durante años, pero no para se convierta en otro presidente priista del estilo "¿qué horas son? las que usted diga, señor."

La izquierda pejista tampoco debería tolerarle a AMLO estas cochinadas. Porque si no le ponemos un freno AHORITA, cuando llegue al poder será demasiado tarde para hacerle entender que el que manda no es él, sino los ciudadanos.

Honestamente, así como están las cosas la consigna de AMLO de "arriba los de abajo y abajo los privilegios" se quedó en calidad de dientes para afuera. Y como dije al principio, los responsables serán los izquierdistas que lo toleraron.

PD:
El diario El País difundió un video de AMLO en junio de 2017 rechazando hacer alianza con el PES bajo el alegato de que sería "pragmatismo ramplón" y por "principios," y porque no se trataba de "ganar a toda costa". Hoy AMLO justificia la alianza con el PES alegando que es para ganarle a la mafia del poder.



El AMLO de hace 6 meses le hubiera dicho al AMLO de hoy que es un pragmático ramplón.

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