La columna Bajo Reserva de El Universal publica el día de hoy confirmación de que la represión en la que incurrió ayer la policía del DF no fue por orden del Jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, sino de la Policía Federal, al mando de Monte Alejandro Rubido, Miguel Ángel Osorio Chong y Enrique Peña Nieto.
En un breve párrafo, Bajo Reserva publica:
"En la búsqueda de evitar cometer dos veces el mismo error, nos dicen que esta vez, durante las marchas de ayer, la Policía Federal envió, además de sus elementos antimotines, a un grupo armado con cámaras fotográficas y de video. Nos comentan que la instrucción del comisionado de la Policía Federal, Enrique Galindo Ceballos, fue que se grabara y fotografiara a detalle la participación de grupos violentos, así como sus detenciones, para que de dichos documentos fueran entregados al Ministerio Público junto con los detenidos. Al final, los federales no tuvieron que entrar en acción."
OJO: La PF no "entró en acción" porque llamaron a la policía del DF. Peña Nieto claramente calculó el operativo para echarle la bolita a el Gobierno del DF a pesar de que las órdenes fueron del gobierno priista.
Nosotros lo dijimos en Twitter desde ayer; los granaderos de la SSPDF que reprimieron y encapsularon a manifestantes y gente inocente estaban ubicados en las inmediaciones del Senado.
El Senado es zona federal, por lo cual la Policía Federal podía implementar un operativo.
Por ley, cuando un operativo federal ocurre en la Ciudad de México, la SSPDF queda al mando de la PF, no del GDF ni mucho menos del Jefe de Gobierno.
Por consiguiente, las órdenes de reprimir y agredir a personas inocentes no fueron del GDF ni de Mancera, sino de el gobierno de Peña Nieto.
Esto se debe a que el DF no es un Estado libre y soberano, y por ley aún depende del gobierno federal para el rubro de seguridad pública.
Vamos, el presidente tiene la facultad para remover al titular de la SSPDF y al Procurador del DF aunque el Jefe de Gobierno no quiera.
"¡Pero Mancera vigiló el operativo desde el C4!" dirán los priistas, los ultras y los despistados. Sí; en efecto Mancera vigiló el operativo. Pero no es lo mismo estar observando un operativo que dando órdenes.
Porque en este tipo de situación, el Jefe de Gobierno simplemente está impedido por ley para intervenir.
Lo grave del caso es que el costo político de la represión se lo pretenden achacar a Mancera, cuando el único responsable fue Enrique Peña Nieto.
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