Mira nomás qué chingón. Ahora resulta que los panistas, que son expertos en guerra sucia, ya no quieren que se hable de sus escándalos y marranadas.
De acuerdo con Notimex, el diputado federal panista Juan Pablo Adame Alemán declaró que el PAN le debe dar "vuelta a la hoja" del escándalo del Escort-gate para mantener al partido unido rumbo a las elecciones de 2015.
Adame, quien es vocero de la bancada panista en la Cámara de Diputados, declaró el viernes pasado que el PAN recibió un duro golpe por el video de los panistas con prostitutas, pero pidió no hacer "leña del árbol caído" y resolver los problemas del PAN "al interior de la casa."
En otras palabras, que ya no les echen en cara sus marranadas a los panistas.
O sea que estos cerdos, que se la pasaron inventando mentiras contra Andrés Manuel López Obrador, no pararon de atacar a Marcelo Ebrard, y se la pasan jodiendo a Miguel Ángel Mancera, ahora no quieren que se hable de las cochinadas y corruptelas que cometen.
El problema es que no es sólo el escándalo de los diputados con prostitutas. Es también el escándalo de los panistas de Jorge Romero en Brasil; el de los moches; el de los funcionarios racistas y misóginos también de Jorge Romero; y desde luego el escándalo de los neonazis panistas de Jalisco y Chihuahua.
¿Y quieren que nadie les diga nada? ¡Chinguen a su madre!
El PAN difícilmente se podrá levantar de estos escándalos, por lo cual lo único que les queda es pedirle al PRD ir en alianza y cederles la mayor parte de las candidaturas en los estados en los que sólo en alianza le podrían ganar al PRI.
Cínicos.
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