De a cuerdo con Reforma, la SEDENA registró la millonaria compra alegando que la flotilla de helicópteros que tienen ya es obsoleta y está deteriorada por tener entre 20 y 35 años.
Sin embargo, la SEDENA no ha explicado por qué tienen que usarse helicópteros en vez de transporte terrestre cuando las actividades de Peña Nieto consisten en dar discursos.
Los nuevos helicópteros serían seis AgustaWestland AW 109-SP, los cuales tienen espacio para seis pasajeros y supuestamente gastan menos combustible.
El oneroso gasto tendría que concretarse en dos pagos; uno este año y otro en 2014.
Este despilfarro se sumaría a la compra del nuevo avión presidencial, el cual tendrá un costo de 6 mil 308 millones de pesos.
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