miércoles, 27 de marzo de 2013

Por qué me vale verga lo que se piense de lo que hago: Una reflexión harto filosófica

Por Victor Hernández

Ya tiene algunos meses que la ultra-requete-recontra-mucha-y-verdadera-e-infalible izquierda ha estado jode y jode con que "es que ya no eres como antes", "te paga Mancera", "ya te vendiste" y mamadas varias por el estilo.

Ayer me salió alguien con que "es que se dice tal y tal de ti" y que ya no soy "referente para muchos como antes". Mi respuesta fue esta:

JAMÁS me ha importado UN CARAJO lo que se piense de lo que hago. No me importó cuando hacía el antiguo Sendero y no me importa ahora.

MUCHAS veces se quejaron en la derecha que defendía a Andrés Manuel López Obrador cuando hacía el antiguo Sendero. Desde luego no pocos inventaron que me pagaban por hacerlo o que buscaba hueso. Ni lo uno ni lo otro. Yo vivía en Estados Unidos, ganaba muy bien en el sector privado y me iba a retirar de hacer ese blog el 3 de julio de 2006 para dedicarme de tiempo completo a hacer animaciones. Pero seguí haciendo el blog para que la gente pudiera seguir informándose inclusive cuando me costó mi trabajo hacerlo y tuve que vivir de mis ahorros durante meses.

Pese a eso, en la izquierda, no pocos se quejaron de que usaba groserías y mentaba madres.

Otros tanto se quejaban de que hacía el TOLIRO NIUS con chistes escatológicos.

Ahora se quejan de que señalo los errores que están cometiendo AMLO y MORENA -pese a que no pocas veces critiqué a AMLO cuando hacía el Sendero- y de que defiendo al GDF, cuando al GDF lo defendía desde antes de que existiera el Sendero. Vaya, lo defendía desde que Cuauhtémoc Cárdenas era Jefe de Gobierno.

También les molesta que señale la charlatanería de ídolos de barro de la izquierda que no le aportan nada a la causa de izquierda más que sus enormes egos.

Y se quejan de este blog haya tenido publicidad del GDF cuando otros medios que se dicen de izquierda (y uno de ellos le ordenó a sus trabajadores que le "bajaran" porque "Calderón ya ganó" en 2006) recibieron publicidad del gobierno espurio de Felipe Calderón y la reciben ahora del gobierno espurio de Peña Nieto, mientras que yo me he negado a recibirla por congruencia para no estar de su lacayo, como sí lo están ellos.

Pues tengo noticias para todos los que se quejan de lo que hago:

1. Me sigue valiendo TRES KILOS DE AUTÉNTICA VERGA.

2. Lo voy a seguir haciendo.

JAMÁS voy a autocensurarme o a dejar de expresar lo que pienso nadamás por tratar de caerle bien a la gente o para darle atole con el dedo a nadie.

"¡Sí, camaradas! ¡La lucha sigue! Los ideales revolucionarios nos guiarán a la victoria! ¡Socialismo o muerte! ¡Fidel y Chávez sí tienen güevos y vamos al paro nacional!" Eso se los dicen para se pongan flojitos y cooperando aunque no tengan estrategia de cómo carajos lograr ganar una elección.

Pero les pregunto ¿qué se ha logrado con eso? ¿Ya se logró paralizar al país para que renuncie Peña Nieto? ¿Ya tiene suficiente gente Gerardo Fernández Noroña para hacer un partido político? ¿Tiene MORENA algún impacto real en el Congreso? (¡Pffft! Ni Ricardo Monreal, que es tan lambiscón con AMLO ha renunciado a Movimiento Ciudadano.)

Así que no; De ninguna manera pienso hacerle eso a la gente. Yo NO los voy a engañar dándoles atole con el dedo y diciéndoles lo que quieren oir aunque sean mentiras y chaquetas mentales.

Antes cierro el blogdeizquierda.com que convertirme en un hipócrita que busque el aplauso fácil y los elogios con deshonestidad.

¿Que me va a costar lectores decir eso? Sí. Lo se. Estoy perfectamente conciente de eso. Y no me importa. Si algo he aprendido en los casi 20 años que llevo en internet, es que el público que se consigue con engaños es el de Televisa, no el que vale la pena.

¿Qué público vale la pena? El que está dispuesto a ver más allá de sus narices y más allá de 2006; El que sabe que todo cambia; Que sabe que sin estrategia la izquierda no llegará jamás a ningún lado, y que la prioridad no es que un personaje específico llegue al poder, sino que llegue al poder un proyecto que garantice que habrá menos gente pobre, menos corrupción, más oportunidades de empleo y más libertad.

En otras palabras, los que saben que para sacar al PRI y al PAN del poder se requiere de astucia, no de consignas.

Esto no es una cuestión de fe, ni de dogmas, ni de ideales; es de sentido común. Los ideales sin estrategia no sirven para un carajo.

Y si eso les molesta, a pesar de que soy el único que no se vende al PRI y que realmente denuncia las traparecerías el PRI (Carmen Aristegui no se ha atrevido a publicar ESTO: http://www.blogdeizquierda.com/2012/06/gerardo-ruiz-dosal-hijo-de-colaborador.html), pues entonces CHINGUEN A SU MADRE. Me pueden bloquear en Twitter, o me pueden dejar de seguir, o me pueden dejar de leer. Hagan lo que quieran. Muy su bronca. Lo único que les GARANTIZO es que voy a seguir defendiendo la libertad de expresión y voy a seguir impulsando al PROYECTO de izquierda que realmente logre llegar al poder para que este pinche país cambie de una vez por todas.

NO pienso tolerar más PRIANismo haciéndome el mártir y chillando a moco tendido que me robaron la elección mientras el PRIAN sigue haciendo de las suyas. Eso se acabó. O nos fajamos como HOMBRES y diseñamos una estrategia CHINGONA para ganar en las urnas, o no tiene ningún sentido seguir jugando al guerrillero de Starbucks.

El que quiera hacer historia, sígame. El que se quiera quedar en el puro berrinche, que se quede. Es su problema. Nadamás que no estorbe. No voy a detenerme para tratar de convencer a chillones. Lo que quiero es que mi país cambie. Pero para lograr eso, primero tiene que ser uno mismo el que debe cambiar. Y si no quieren cambiar ustedes, funden su comuna, siempren su maíz y hagan como que son hermitaños y vivan felices.

Pero yo soy otro tipo de hermitaño, que viste de humilde jerga, y que del cerro baja cada año, a que le pelen.... le razuren... y le hagan todo el servicio de peluquería.

Espabilen la baba y alivianen el mosquero. Ya tienen peleas en la Coliseo y películas en el Curto.


Su padre,
Victor Hernández

PD: Otros, en público, salen con sus "les ruego me lean", "suplico que me lean", y en general se hacen pasar por muy propios y muy cordiales. En realidad, los están tratando de engañar. En privado, se burlan de ustedes, y gustosos les escupirían la cara. ¿Qué prefieren? ¿Alguien que les está diciendo la verdad aunque sea dura y difícil de asimilar? ¿O alguien que les da atole con el dedo para engañarlos?

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