Sin emnargo, de acuerdo con Animal Político, el valor comercial del avión es en realidad de 2 mil 688 millones de pesos. Es decir, se le tiene presupuestado un sobreprecio de más del triple.
Esto porque, según el presupuesto, se pretende pagar el costo del avión, los gastos de operación y el mantenimiento, así como los intereses generados por el arrendamiento y adecuación de la aeronave para las necesidades del gobierno mexicano.
La excusa de la Sedena para solicitar la compra del nuevo avión fue evitar el tener que hacer escalas en viajes a Europa.
Esto a pesar de que hoy en día ya no es necesario estar físicamente presente en cualquier parte del mundo, ya que se puede tener comunicación por medio de teléfono e internet.
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