viernes, 30 de diciembre de 2011

Les pido de favor que no mamen

Por Victor Hernández

Salgo de la librería del Fondo de Cultura Económica en Miguel Ángel de Quevedo. Serían las 8 de la noche o algo así. En la entrada un tipo con una libreta y finta de medio intelectual me pone enfrente un volante y me dice que si gusto apoyar con una firma "para reducirle a la mitad el presupuesto a los partidos políticos."

Leo el volante. Dice que la propuesta es impulsada por Denisse Dresser, Lorenzo Meyer, fulano, mengano, sutano, y Miguel Ángel Grandos Chapa.

Le pregunto al tipo con finta de intelectual: "Oiga, ¿Y cómo es que Miguel Ángel Granados Chapa está apoyando esto si murió hace meses?"

"Bueno, es que nos apoyó al principio y..."

"¿Y bajó qué mecanismo piensan reducir a la mitad el dinero de los partidos políticos?" le pregunto.

Pero en vez de una respuesta, lo que hace el tipo es quitarme el volante y decirme "muchas gracias".

O sea que me pide mi firma y número de credencial de elector, pero no es capaz de explicarme exactamente cómo le piensan reducir a la mitad el dinero a los partidos.

La pregunta es bastante válida. Actualmente el dinero que reciben los partidos políticos se determina principalmente en base a la cantidad de personas registradas en el padrón electoral. Otro porcentaje se determina en base a la cantidad de votos que reciben en cada elección.

Por consiguiente, inclusive si se redujera en 50% el dinero que reciben los partidos, esa cantidad va a incrementar año con año porque año con año crece el padrón electoral.

En otras palabras, el que propuso eso de reducir 50% el dinero de los partidos es un pendejazo que nisiquiera sabe cómo funciona el presupuesto elecporal.

Ahora bien; este sexenio hubo un curioso incidente en la cámara de diputados en el cual le reclamaron al PAN por no apoyar que se le redujera el sueldo a la mitad a la alta burocracia. Creo que fue César Nava el que respondió que mejor se le redujera a la mitad el presupuesto a los partidos.

Con el detalle de que lo que se le asigna a los partidos políticos es una fracción pequeñísima de lo que se gasta la alta burocracia. Proponer reducirle el presupuesto a los partidos, por lo tanto, es una tomada de pelo que sólo sirve para verle la cara a la gente.

Si el tipo afuera de la libería era panista, no lo se. Pero de que no sabía ni lo que estaba proponiendo no me queda la menor duda (o sea que a lo mejor sí era panista).

Lo lamentable del caso, es que haya genta que se deje engatuzar por este tipo de mamadas sin siquiera saber a lo que le están tirando.

Por eso les pido de favor que no mamen. O por lo menos que escondan los dientes y no arranquen pelos.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario