Televisa echó a andar su maquinaria de difamación el día de hoy para atacar a Jesús Ramírez Cuevas, secretario de comunicación social de Andrés Manuel López Obrador.
En específico, Televisa usó sus espacios para que uno de sus empleados, Federico Arreola, dueño del sitio priista SDP Noticias, calumniara a Jesús Ramírez Cuevas alegando que la lista de periodistas que recibieron grandes cantidades de dinero del gobierno de Enrique Peña Nieto fue una "venganza personal" de Ramírez Cuevas.
Lo cual es absolutamente falso.
Mire usted:
Para empezar, la lista del chayote no fue idea de Jesús Ramírez Cuevas ni de Andrés Manuel López Obrador. El diario Reforma solicitó vía transparencia que AMLO diera a conocer quienes eran los periodistas que recibieron dinero del gobierno de Peña Nieto. AMLO se negó a divulgar la información. Reforma apeló y el INAI obligó a AMLO a dar a conocer la información. Siendo el rubro que le corresponde, Jesús Ramírez Cuevas hizo la lista y la entregó a Reforma, tal y como se lo ordenó el INAI.
No hubo venganza de ninguna índole. Se entregó una información que ordenó la autoridad que se entregara. Punto.
La lista dejó claro que los top-3 del chayote fueron todos empleados y/o socios de Televisa: Joaquín López Dóriga, Federico Arreola y Enrique Krauze. López Dóriga tiene programa en Televisa desde hace años. Krauze es miembro del consejo administrativo de Televisa. Y Arreola es empleado de Televisa luego de que la televisora le comprara su sitio de internet.
Y los tres cayeron en una o más de las siguientes categorías durante el sexenio del Peña Nieto:
1. Defender a Peña Nieto.
2. Atacar a AMLO y a la izquierda.
3. Difundir información falsa que favorecía a la derecha, específicamente al PRI.
Arreola en particular se la pasó defendiendo a Peña desde la campaña electoral de 2012 y durante todo su sexenio. Luego de 2012, Arreola difundió encuestas con números completamente fuera de la realidad para alegar que el PRI tenía una ventaja que nunca tuvo. Lo hizo en los casos de las elecciones de Puebla, Baja California, Veracruz y desde luego en la elección presidencial de 2018, alegando que José Antonio Meade estaba en segundo lugar en las encuestas cuando claramente estaba en lejano tercer lugar. Fue uno de los casos más descarados de fake news en el sexenio de Peña.
Ah, y desde luego Arreola atacó a Carmen Aristegui por los reportajes que publicó poniendo en evidencia a Peña Nieto, particularmente por el caso de la Casa Blanca.
Así que ir a Televisa a atacar a Jesús Ramírez Cuevas más bien parece una venganza personal de Arreola contra Ramírez Cuevas. La idea, sugieren sus acciones, es tratar de pegarle a AMLO pero sin pergarle directo para ver si así se congracia y le dan más publicidad oficial.
Ahora bien, los primeros en respingar por la lista del chayote fueron López Dóriga y Krauze. Pero lo hicieron por su cuenta, sin valerse de la maquinaria de Televisa. López Dóriga con un tuit y Krauze con un comunicado en su sitio de internet, difundido también por medio de Twitter. Arreola al principio no dijo nada. Luego publicó una columna tratando de victimizarse, pintándose a sí mismo como una especie de perseguido por haber recibido dinero del gobierno de Peña Nieto.
Al parecer la columna no le funcionó a Arreola, por lo cual hoy lunes fue al programa de Carlos Loret de Mola a victimizarse de nuevo, pero esta vez atacando directo a Jesús Ramírez Cuevas.
¿Por qué? Pues porque SDP es un fracaso comercial. Nunca tuvo publicidad de empresas entre 2008 y 2011. Sus clientes principales fueron el gobierno de Javier Duarte de Ochoa y luego el de Enrique Peña Nieto. Y para ser cliente de un gobierno priista lo único que se necesita es ser servil con ese gobierno. Lo se porque lo vi con mis propios ojos. Fui testigo de cómo me dijeron en mi cara que el gobierno priista de Javier Duarte exigía que se dejara de criticar a Peña Nieto y a Eruviel Ávila, y que ya no apareciera en la página principal Andrés Manuel López Obrador.
Uno no puede más que suponer que Televisa compró SDP pensando que sería una buena manera de tener más dinero del gobierno. Pero ahora que el gobierno de AMLO puso en evidencia a los chayoteros de Peña Nieto, la viabilidad monetaria de SDP queda en entredicho. Si no hay chayote, no hay razón alguna para que Televisa esté gastando sus propios recursos en mantener a ese sitio. Máxime ahora que Televisa sigue perdiendo dinero por concepto de espacios publicitarios ante el desplome de las audiencias de televisión abierta. De ahí, uno supondría, la desesperación de Arreola y de Televisa por hacer control de daños directamente desde Televisa.
La verdad, no hay razón para que el gobierno le siga dando dinero a SDP. Su tráfico es ficticio, ya que se vale del uso del clickbait para generar visitas casuales que no generan un público cautivo. Y Comscore le cuenta ese uso de clickbait como visitas válidas cuando claramente no es el caso.
Por lo cual le expreso mi solidaridad con Jesús Ramírez Cuevas ante los ataques de Televisa en su contra. Podré no estar de acuerdo en todo lo que hace Jesús, pero lo que está haciendo Televisa es una calumnia y de ninguna manera voy a estar de acuerdo en que se calumnie a Jesús por haber cumplido con una orden del INAI. Mucho menos sabiendo la clase de podredumbre que lo está atacando.
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