Se hizo algo de ruido por el hecho de que el ultraderechista Ted Cruz, senador de Texas, anunció que buscaría la candidatura presidencial del partido Republicano de Estados Unidos.
"¡El primer hispano candidato a presidente! ¡Un latino podría ir a la Casa Blanca!" dicen en los medios de Estados Unidos para tratar de vender notas. Pero no es el caso. Ted Cruz es un mal chiste y su búsqueda de candidatura a la presidencia de EU es irrelevante.
Vea usted por qué:
Para empezar, Cruz nisiquiera es "hispano". Su apellido es hispano porque su familia es de Cuba, pero él no habla español.
Ni le interesan los temas que afectan a los latinos en Estados Unidos.
Lo que sí es Cruz es un fanático ultraderechista que niega el cambio climático; que se opone al aborto; que se opone al matrimonio gay; y que en general está en contra de cualquier cosa que signifique progreso social.
Cruz ha llegado a un grado de imbecilidad tan lamentable que en un evento político tuvo el mal gusto de asustar a una niña pequeña diciéndole "tu mundo se está quemando", esencialmente haciendo el alegato de que si no votan por él entonces el mundo se va a colapsar.
Aquí el video. Adelántenle al minuto 0:51:
http://on.cc.com/1DvLXZ2
Eso nadamás para que quede clara la postura política de Cruz, la cual es equivalente el más recalcitrante de los panistas del Yunque o peor.
Pero como dije, la candidatura de Cruz es irrelevante. Desde hace años el Partido Republicano de Estados Unidos -los ultraconservadores- siempre ponen de precandidatos a algún integrante de algún grupo minoritario para que parezca que son incluyentes cuando en realidad no lo son.
Hace 15 años pusieron de precandidato a Alan Keys, quien es afroamericano, nadamás para las internas. El que ganó fue George W. Bush.
En 2008, ante la presión que causó que Barack Obama y Hillary Clinton -afromericano y mujer- fueran precandidatos, los Republicanos pusieron de candidata a vicepresidenta a Sarah Palin, la primera vez que una mujer era candidata a vicepresidente. Pero Palin resultó un desastre para los Republicanos. No porque fuera mujer, sino porque es ignorante, retrógrada e hipócrita.
Luego de 2008, tratando de competir con el el hecho de que Obama es afroamericano, los Republicanos pusieron de líder nacional de los Republicanos a Michael Steel, quien es afroamericano.
Y en 2012, tratando de llamar la atención de los electores, los Republicanos pusieron de precandidatos a un afromamericano y a una mujer. El afroamericano fue el empresario Herman Cain, quien tuvo que declinar luego de que no supiera responder preguntas de política exterior ante la prensa.
La mujer fue la congresista Michele Bachmann, quien tuvo que declinar luego de que se supo que es una ignorante sobre política de salud (acusó a la vacuna contra el papiloma de causar retraso mental) y que su esposo ofrecía "curar" la homosexualidad.
Fue tan duro el fracaso de Bachmann que de plano ya no quiso buscar la reelección para su curul en la Cámara Baja.
Ah, y al final el candidato Republicano fue Mitt Romney, quien es anglosajón.
Para 2016 las cosas empiezan a pintar muy mal para los Republicanos. Hillary Clinton le lleva una fuerte deleantera en encuestas y opinión pública, mientras que entre los Republicanos nisiquiera saben a quién poner de candidato.
Una encuestas de Quinnipiac dada a conocer hoy, por ejemplo, muestra que la mayor ventaja entre los Republicanos es un empate entre Jeb Bush (13%) y el gobernador de Wisconsin Scott Walker (13%), seguidos con 12% por el gobernador de Nueva Jersey Chris Christie y en tercer lugar el senador de la gusanera de Florida Marco Rubio con 10%.
Ted Cruz está en quinto lugar en esa encuesta con 3% de preferencia. No por racismo. Cruz está emptado con el ex gobernador de Arkansas Mike Huckabee, y Marco Rubio, quien también es cubano y sí habla español, tiene 10% (aunque es exactamente igual de ultraderechista retrógrada que Cruz).
Cruz está en quinto lugar porque ni los Republicanos lo ven como buena opción para ganar las elecciones debido a su extremismo ultraderechista.
Pero claro; en los medios pretendieron darle mucho vuelo a la nota de que Cruz dijo que sí iba por la candidatura para vender notas, no porque Cruz tuviera la más remota posibilidad de ganar.
Todo parece indicar que en esta elección los dos precandidatos patiños de minorías serán Marco Rubo y Ted Cruz. Como en su momento lo fueron Keys, Cain y Bachmann. El candidato Republicano en realidad sería o Jeb Bush -lo más probable según las encuestas- o Scott Walker.
Lo que tal vez podría pasar es que Jeb Bush elija de candidato a vicepresidente a Marco Rubio.
Y aún así no le podrían ganar a Hillary Clinton, quien lo único que tendría que hacer es elegir a un vicepresidente latino o afromericano, o a una mujer -Elizabeth Warren, por ejemplo- para ganar sin mayor problema.
¿En qué le afecta todo esto a México? Sólo le podría afectar si ganan los Republicanos, ya que eso garantizaría que no habrá reforma migratoria. Si gana Hillary Clinton, y los Demócratas ganan la mayoría en el Congreso, entonces la reforma migratoria estaría prácticamente garantizada.
Cruz, de una vez hay que señalarlo, no aprobaría jamás una reforma migratoria porque ni le interesa ni es compatible con su ideología ultraderechista recalcitrante.
Así que la próxima vez que mencionen en los medios en México a Ted Cruz, ya tienen la información para no dejarse engatuzar.
PD: Una encuesta de Quinnipiac del 5 marzo muestra que en la elección presidencial Hillary Clinton le ganaría 45% contra 42% a Jeb Bush. Le ganaría tembién 48% contra 39% a Scott Walker; 47% contra 41% a Rand Paul; 47% contra 40% a Mike Huckabee; 46% contra 39% a Chris Christie; 46% contra 41% a Marco Rubio y 48% contra 38% a Ted Cruz.
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