Por Victor Hernández
El asesinato de 12 jóvenes en una posada en el municipio de Salvatierra, Guanajuato dejó de parecer masacre del narco y más bien parece terrorismo de derecha.
Un comando armado aparece en una posada en una ex hacienda, abre fuego contra los presentes, e incendia vehículos como si se tratara de un narcobloqueo. Pero no se deja un mensaje en el lugar y nadie se hace responsable por lo ocurrido.

