Por Victor Hernández
El INE ocultó una segunda encuesta por la cual pagó y en la cual la mayoría de los encuestados están de acuerdo con que los consejeros del INE y magistrados electorales sean electos por voto popular directo, no por acuerdos en lo oscurito entre los partidos políticos.
La encuesta, que fue realizada en abril de este año, nisiquiera estaba disponible en el sitio de internet del INE, por lo cual Morena tuvo que solicitarla directamente.
El dato clave de esa encuesta es que 78% de los encuestados estuvieron de acuerdo con que se elija a los consejeros del INE y a los magistrados del Tibunal Electoral por voto popular. Eso quiere decir que en 6 meses la aceptación de la propuesta aumentó 11 puntos.
Esto destruye el alegato de Lorenzo Córdova y de Ciro Murayama de que la encuesta de octubre del INE no vale porque sólo 27% de los encuestados conocían la reforma electoral, y 2 meses después la encuesta de Reforma dice que poco más del 50% no está de acuerdo.
Y es que si en 6 meses la opinión a favor de la reforma electoral aumentó, y más gente supo de la reforma, entonces no tiene sentido que en 2 meses la opinión a favor de la reforma electoral se desplome.
Con lo cual tenemos que el INE sabía que la aceptación de la reforma electoral de AMLO estaba creciendo y no sólo ocultaron las encuestas que lo mostraban, sino que ahora mienten para tratar de invalidar las propias encuestas del INE sólo porque los cacharon.
Lo cual explicaría también por qué el PRIAN tuvo que decir que participaría en la marcha de berrinche de Claudio X González; porque la derecha sabe que no hay apoyo popular al sabotaje a la reforma electoral, y para que parezca que haya tienen que llevar acarreados del PRIAN.
Pero al final la reforma electoral sí pasará. La aplazaron para diciembre, pero de que va a pasar va a pasar.
Y entonces sí la derecha se queda sin manera de hacer fraude y sin manera de sabotear consultas populares. Lo cual, desde luego, siempre será bueno.
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