Sin embargo, de acuerdo con Reforma, la CNDH afirmó que el proyectil no fue una bala de goma, sino un proyectil de gas lacrimógeno, como alega el gobierno estatal panista.
La CNDH concluyó que sí hubo violaciones graves de derechos humanos en el desalojo y que la Secretaría de Seguridad Pública Estatal y la Procuraduría de Justicia de Puebla incurrieron en el uso undebido de la fuerza pública.
Además, la policía de Moreno Valle y la PGJ cometerion violaciones a los derechos a la vida, libertad de reunión, integridad personal, seguridad jurídica, trato digno, y acceso a la verdad e información, dijo la CNDH.
Acusaron además a la SSP de Puebla de usar de forma excesiva y negligente 478 cartuchos y granadas de gas lacrimógeno contra los manifestantes el pasado 9 de julio.
En el caso del niño José Luis Tlehuatle, la CNDH niega la versión del gobierno panista de Puebla de que murió por el estallido de un cohetón, pero alega que murió al ser impactado por algo de los 64 proyectiles de largo alcance utilizado por la policía de Moreno Valle.
Esto se comprobó por la lesión ovalada que ocasionó desprendimiento total de tejido óseo, fractura, hemorragia y edema cerebral, entre otras afectaciones.
"Se descartó que la lesión hubiera sido producida por proyectil de arma, alguna explosión, u onda expansiva por la acción de un cohetón tipo cañón", dijo la CNDH.
"Según las características que presentó el cráneo, y ante el tipo de armamento que portaban los elementos de la Policia Estatal Preventiva, para esta Comisión existen elementos suficientes para llegar a la conclusión de que las lesiones fueron producidas por alguno de los 54 proyectiles de largo alcance irritantes, calibres 37-38 milímetros CEN- 3221, o con uno de los 10 proyectiles de largo alcance irritantes, 37-38 milímetros CS", agregó.
También acusó a la Procuraduría Estatal de limpiar la escena de los hechos sin recoger la evidencia necesaria para la investigación; no brindó atención adecuada y eficaz a las víctimas, y ha dejado los casos, incluyendo el del niño José Luis, en la impunidad.
La CNDH señaló como responsable a
Facundo Rosas, titular de la SSP de Puebla, por uso excesivo de la fuerza pública, pero dejó en el limbo si sería sancionado el gobernador panista, Rafael Moreno Valle.
Y es que la Comisión declaró habrá una denuncia de hechos contra los servidores públicos responsables por los hechos, pero no dijo nombres específicos, aunque admitió que podría involucrar a Rosas, al procurador de Puebla Víctor Carrancá, e incluso al propio Moreno Valle.
Recomendó además la reparación del daño a las víctimas; la creación de una Fiscalía Especial que investigue los hechos, y una disciplina institucional por parte del gobierno panista.
Cabe mencionar que la madre del niño, Elia Tamayo, declaró que si la CNDH no tramita el juicio político contra Moreno Valle, lo tramitará ella misma por medio de sus representantes legales.
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