Como siempre mostrando que en el fondo es un priista más, el panista Javier Lozano Alarcón se puso del lado del PRI para atacar al PRD en el debate sobre las leyes secundarias de la reforma energética.
Lo hizo tuiteando una foto de una manta del priista y amigo de Kamel Nacif Emilio Gamboa, en la cual se mostraba que el PRD había usado el 60% de las intervenciones en el debate y el 63% del tiempo total. Que por eso no se podía quejar el PRD de que no se les ha permitido expresar su punto de vista.
Lozano mintió.
Para empezar miente porque si el PRD está teniendo la mayor parte de las intervenciones en el debate es porque el PRI, el PAN, y sus satélites PVEM y PANAL nisiquiera quieren debatir. Quieren aprobar la privatización de Pemex lo más rápido posible y, de preferencia, al vapor.
Por consiguiente, es mentira que el PRD acapare el debate. El PRIAN es el que no quiere que haya debate y mientras menos se tarde en agotarse el debate, para el PRIAN mejor.
En segundo lugar, el PRIAN hizo todo lo posible por limitar el tiempo total de debate de las reservas de los dictámenes. En vez de permitir que se hicieran las más de 807 reservas que pidió la izquierda, agruparon las reservas por temas para que no se tardaran mucho. Eso con la intención de no permitir al PRD debatir la mayor cantidad de tiempo posible ya que, de hacerlo, tomaría más de una semana concluir el debate.
Y el PRI quiere que se apruebe la privatización de Pemex al vapor.
Por eso también es que el PRI limitó las sesiones del Senado a 12 horas cada una, para que los senadores del PRIAN aguantaran el debate y no se quedaran dormidos ni rompieran el quorum durante los 6 días contínuos de debate que hubieran resultado de leerse todas las reservas una por una.
Lo que Lozano debería hacer mejor es cambiar de partido y regresarse a las filas del PRI. Tanto con la Ley Televisa como con la privatización de Pemex, Lozano está demostrando que sigue siendo salinista.
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