La sección Ciudad del diario Reforma le dedicó ayer ocho columnas a la delegación Azcapotzalco, cuyo jefe delegacional es Sergio Palacios, por un programa de apoyo a los comerciantes de la delegación mediante el cual, durante un año, los establecimientos que no cuenten con todos sus permisos no serán verificados paraque puedan poner sus documentos en regla.
Esto debido a que se calcula de los 17 mil 528 establecimientos registrados en el padrón, 30% tiene alguna irregularidad subsanable.
El programa busca que las empresas se acerquen al gobierno delegacional, se inscriban en el programa, y cumplan con los requisitos.
El delegado Sergio Palacios declaró que "además, los podremos asesorar acerca de cómo pueden obtener ese documento que les hace falta, y ayudarlos a conseguirlo".
Los únicos que no podrán regularizarse serán os que abrieron su negocio recientemente sin un uso de suelo para su negocio, pero al concluir el año de "tregua" serán verificados.
Palacios busca partir de un principio de confianza y de creer en la buena fe de los comerciantes, pero sin que se interprete como tener un año más para seguir violando la ley.
"Lo que quiero es cambiar la mentalidad, que la gente se ponga en orden. La bronca es que en muchos temas, todo empieza a partir de la desconfianza. Quiero cambiar en políticas públicas y en administración, quiero que partamos de un término de confianza", dijo Palacios.
Y eso, damas y caballeros, se llama apoyo de la izquierda a la iniciativa privada.
¿Ven cómo no está peleada la izquierda con los empresarios? Al revés: los apoya.
Deberían de aprender los funcionarios de la delegación Benito Juárez, donde se amenaza a los comerciantes con negarles la renovación de sus permisos (lo cual cuesta 120 mil pesos) a menos de que accedan a dejar de usar gas LP y usen gas natural. Claro, de la trasnacional española Gas Natural Fenosa.
¿Así cómo va a funcionar correctamente el comercio en Benito Juárez?
Qué bueno entonces que hay delegados como Sergio Palacios que ponen el ejemplo de cómo se puede trabajar con los empresarios para que el comercio crezca. Prueba de que la izquierda le conviene más a los comerciantes que la derecha.
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