Por Victor Hernández
Ayer unos cuantos changos del EsquizoFRENAA hicieron el intento de llenar el Zócalo con 100 mil personas. Pero no lograron llenar ni la mitad del Zócalo, como claramente muestra el time lapse de Webcams de México:
Video timelapse del Zócalo #CDMX desde las 11am hasta las 4:02pm de hoy 3 de octubre 2020 pic.twitter.com/2q24nIlEcI
— Webcams de México (@webcamsdemexico) October 3, 2020
No lo llenaron a pesar de que el EsquizoFRENAA pagó a acarreados por ir a hacer show al Zócalo. Aquí la evidencia que se documentó en Twitter:
Así juntó #FRENAAA sus acarreados.
— 𝐄𝐥𝐢𝐳𝐚𝐛𝐞𝐭𝐡 𝐕𝐞𝐫ó𝐧𝐢𝐜𝐚 𝐆𝐨𝐧𝐳á𝐥𝐞𝐳 (@taller2006) October 3, 2020
Por un viaje gratis, una torta y 200 pesos. Gilberto Lozano compró voluntades de nos cuántos lunáticos. pic.twitter.com/JWEAz0qbbt
— vicky Martinez (@vickyMa89370246) October 3, 2020
En otras palabras, los del EsquizoFRENAA volvieron a hacer el ridículo. Pero aún así, algunos en la izquierda insistieron en darle a los derechangos una importancia que no tiene.
Quesque porque son muy "peligrosos", dicen. Y sí; no hay nada más peligroso que un pendejo con iniciativa. PERO en este caso los del EsquizoFRENAA no pasan de ser unos cuantos loquitos con mucho tiempo libre, ya que no tienen NADA que les permita de verdad hacer algo contra la voluntad de la mayoría de los mexicanos.
No tienen ejército.
No tienen una plataforma política que atraiga votantes.
No tienen liderazgos que no sean vistos como unos pinches orates.
No tienen NADA.
Lo único que tienen es dinero. Pero ese dinero no les sirve para un carajo. Intentaron de llenar el Zócalo con acarreados y no pudieron. Tienen que pagarle a VAGOS para que habiten las casas de campaña del Zócalo. No tienen, insisto, NADA.
Per al estar poníéndoles tanta atención, la izquierda les da a los orates del EsquizoFRENAA un poder que NO tienen.
No les den poder entonces. Esos changos no pasan de ser perros de azotea. Lo mejor que se puede hacer es IGNORARLOS. Exhibirlos en redes sociales en todo caso, pero NUNCA darles el poder que no tienen preocupándose por ellos.
Y ya fin. Hay asuntos menos pedorros por los cuales preocuparse, la verdad.
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