El problema de inseguridad en Valle de Bravo, Estado de México no es nuevo. Lo único que es nuevo es que ahora los medios le están poniendo atención.
A mi no me cuentan como está Valle de Bravo. Conozco el municipio y me consta que desde hace meses el gobierno municipal priista está tan espantado con la inseguridad que pasan camionetas de parientes de los priistas escoltadas con camionetas de la policía estatal y del ejército.
En diciembre pasado, por ejemplo, fui testigo de cómo se asombró un grupo de turistas que vieron pasar el convoy que vigilaba la camioneta en la que se paseaba como reina quien parecía ser una familiar del alcalde.
Otros tomaron fotos de una camioneta del ejército con torreta de fusil de alto poder. No podían creer que fuera necesario que hubiera soldados en el pueblo.
Y aún así, con militares, con policías estatales ¡desde el año pasado! el secuestro ya es escándalo en los medios.
Que son los Templarios, dijo hace unos días El Universal. Que la presión de "las familias de empresarios y políticos con casas de campo en Valle de Bravo, Estado de México, ha provocado que las autoridades federales evalúen el despliegue de elementos de la Secretaría de Marina" a Valle de Bravo.
Pero como dije, ya hay militares en Valle de Bravo. Añadir más militares no va a cambiar la cosa. Si los Templarios operan en Valle de Bravo es con el permiso del PRI.
Aún así el gobierno priista armó un operativo con 500 policías federales y estatales que al final resultó inútil, ya que ayer se dio a conocer que fueron secuestrados dos turistas más, lo cual con toda seguridad le pegará al municipio ya que el pueblo de Valle de Bravo es esencialmente un destino turístico.
La realidad es que el PRI permite el crimen en Valle de Bravo. Vamos, permite que as "familias de empresarios y políticos" y otros ricachones que se van de fin de semana a Valle de Bravo a sus casas de campo, tengan al pueblo hecho un asco, dejando basura por todos lados que ahí queda por días y días sin que nadie la recolecte.
Eso no me lo contaron. Lo he visto con mis propios ojos todas y cada una de las varias veces que he visitado Valle de Bravo.
Y no sólo es basura; hay destrucción de áreas públicas y nula cultura cívica. En diciembre, por ejemplo, unos chamacos le prendieron fuego a un puesto cerca del embarcadero donde están los botes que hacen recorridos por la laguna artificial. De no ser por un turista que apagó el fuego, se hubiera quemado por completo el puesto.
Eso sí: por todos lados hay propaganda del gobierno priista. Este pueblo está hecho una mierda gracias al PRI.
¿Por qué lo tolera la gente? Pues porque muchas de las casas de Valle de Bravo son precisamente casas de campo de ricachones y políticos (valga la redundancia) que sólo están ahí un par de días y se van. No les importa lo que pase en el pueblo ya que se encierran en sus casas de campo y lo demás les importa poco, aunque las calles estén llenas de basura y el municipio no recolecte la basura por días.
De ahí que el gobierno priista haya dejado crecer a la inseguridad en Valle de Bravo. Como a los ricos no les importa que dejen el pueblo en mal estado, el gobierno priista no hace nada.
Con una población flotante así de importamadrista, obviamente nunca les importó la inseguridad en Valle de Bravo hasta ahora, que finalmente les empezó a afectar en lo personal.
Pero el PRI no va a evitar que haya más inseguridad ni va a evitar los secuestros. El hecho de que se los atribuyen a los Caballeros Templarios, quienes tienen acuerdos con el PRI de Enrique Peña Nieto para tener impunidad, es garantía de que los ricos no podrán estar tranquilos en sus casas de campo. Y menos con el aumento en la pobreza que causarán las reformas de Peña Nieto.
Sólo hay una manera de que se frene la inseguridad; con la izquierda en los tres niveles de gobierno. Es eso, o que los ricos sigan expuestos a que los secuestren los aliados del PRI en el narco.
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