La Secretaría del Trabajo del DF empezó a credencializar a trabajadoras sexuales de la Ciudad de México para que puedan defenderse de detenciones arbitrarias y discriminación.
La credencial las acredita como trabajadoras sexuales y se debe refrendar anualmente.
Ahora lo que debe seguir en el DF, por lo tanto, es la regulación del sexoservicio y del trabajo erótico en la Ciudad de México.
El sexoservicio no es ilegal en el DF. El lenocinio y la trata sí son ilegales. Pero debido a que no hay una regulación para el sexoservicio ni para el trabajo erótico, cuando hacen operativos contra la trata se llevan entre las patas a trabajadoras y trabajadores que nada tienen que ver.
Una regulación eficaz, y que no le cause problemas a las trabajadoras sexuales y eróticas, implicaría lo siguiente:
1. Registro ante el gobierno del DF de todas las trabajadoras y trabajadores sexuales y eróticos. Esto incluye sexoservidoras y sexoservidoras, bailarinas y bailarines, masajistas eróticos, escorts, etc.
2. Examen médico obligatorio quincenal para detectar enfermedades de transmisión sexual.
3. Compartir la información de las credenciales y exámenes entre las secretarías del trabajo, seguridad pública y de salud. Ya comparten los datos las secretarías del trabajo y de seguridad pública. Falta que se involucre la de salud.
4. Revisión aleatoria diaria de centros nocturnos, salas de masajes eróticos (no confundir con masajes terapéuticos), casas de citas, table dance, y lugares donde se ejerza el sexoservicio para revisar que sólo estén trabajando personas credencializadas y con certificado de salud.
5. Sanción severa para establecimientos en los que se permita el trabajo sexual sin registro.
6. Vigilancia permanente afuera de los establecimientos donde se realice trabajo sexual y erótico para protección de trabajadoras, trabajadores y clientes.
Sólo así se podrá garantizar seguridad y salud pública en el sexoservicio en el DF sin interferir con las y los trabajadores sexuales y eróticos.
De lo contrario, de continuar con la dinámica actual de cerrar teibols por operativos anti-trata, sólo se estará afectando y estigmatizando a las trabajadoras sexuales y eróticas usando como pretexto el combate a la trata.
Y si bien combatir la trata es importante, también lo es respetar la decisión de mujeres y hombres que deciden dedicarse al sexoservio o al trabajo erótico.
PD: Desafortunadamante, algunas personas en la prensa "de izquierda" tienen un problema personal contra cualquier actividad erótica remunerada por parte de la mujer. A veces parece que es un problema de odio. Que arreglen sus broncas personales esas personas en la prensa "de izquierda" entonces, porque una cosa es trata y otra sexoservicio. No son lo mismo y se debe respetar a las personas que deciden dedicarse a la actividad sexual remunerada por voluntad propia.
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