Por Victor Hernández
Publicó ayer el periodista Álvaro Delgado el siguiente comentario en Twitter: "¿Por qué triunfó @JMilei
? Por lo mismo que triunfaron Trump, Bilsonaro…"
En el mismo tuit, Álvaro citó otro tuit de Rafael Narbona que, palabras más, palabras menos, dijo que el triunfo de Milei es un "fracaso del sistema democrático" y agrega un texto en el que plantea "por qué triunfan los demagogos".
Ambos, Álvaro y Narbona, se equivocan. Mire usted:
Del texto de Narbona cito el siguiente párrafo:
Los demagogos aprovecharon esta situación (crisis económica) para prosperar. Trump, Bolsonaro y Milei se han presentado a sí mismos como políticos antisistema, pero lo cierto es que son los pilares más sólidos de un sistema que no cesa de menoscabar el Estado de bienestar, favoreciendo a las grandes corporaciones comerciales. Unos medios de comunicación instrumentalizados por el poder económico y un creciente desinterés por la cultura han propiciado el ascenso de los demagogos.
Esto es falso. En el caso de Donald Trump éste llegó al poder sin ganar el voto popular. Logró ganar el voto de colegio electoral ya que tuvo más votos en algunos estados clave de Estados Unidos, mientras que Hillary Clinton tuvo 3 millones de votos más que Trump en el voto popular.
Lo que realmente ocurrió en Estados Unidos con Trump fue que en algunos estados clave hubo abstencionismo de votantes Demócratas. Esto lo evidencié con números en 2017 en mi libro How Donald Trump Won: The Election that Hurt America (Cómo ganó Trump: La elección que dañó a América). Este abstencionismo de Demócratas fue lo que le permitió a Trump ganar el colegio electoral y llegar al poder sin tener el voto popular.
¿Por qué hubo abstencionismo entre votantes Demócratas? Dos razones:
1. No les cayó bien Hillary Clinton porque la veían como "más de lo mismo" comparada con el socialista Bernie Sanders. De hecho, hubo muchos votantes Demócratas que escribieron el nombre de Bernie Sanders en su boleta electoral.
2. Porque pensaron que era imposible que ganara Trump, así que no les pareció que su voto fuera importante. Con o sin su voto, pensaron, ganaría Hillary Clinton.
Ese abstencionismo Demócrata desapareció en 2020. Los que no votaron en 2016 salieron a votar en 2020 porque sabían del peligro que representaba otros 4 años de Trump. Y lo mismo va a pasar en 2024.
Con Bolsonaro las cosas fueron distintas. En Brasil sí se dio un fenómeno parecido al de Milei, pero por la percepción de que había corrupción en los gobiernos de Lula y de Dilma Rousseff, mientras que en Argentina el eterno problema es que ni izquierda ni derecha han logrado mejorar la economía de ese país.
Ahora bien, el común denominador en los gobiernos de ultraderecha "demagógica" (Trump, Bolsonaro, y próximamente Milei) es que no cumplen lo que prometen y los sacan del poder a la primera. En 4 años Milei no podrá cumplir con sus disparates de campaña y lo van a sacar del poder en la siguiente elección presidencial.
En cierta forma Trump, Bolsonaro y Milei son más bien lo que pasó en México con el regreso del PRI. La gente pensó que con el PRI de regreso las cosas iban a mejorar porque "el PRI roba pero deja robar". Cuando se dio cuanta la gente de que el PRI roba pero no deja robar mas que los de hasta arriba, la gente los sacó del poder y puso a Andrés Manuel López Obrador.
La diferencia es que AMLO sí cumplió con lo que prometió. Ahora el riesgo es que los votantes lopezobradoristas no están entusiasmados con Morena ni con Claudia Sheinbaum, quien tiene ahora dos riesgos:
1. Que haya abstencionismo y eso le permita a la derecha no ganar, pero por lo menos no dejarle la mayoría calificada a Morena.
2. Que la saquen del poder vía revocación de mandato en 2028.
Porque al final la gente ve a Claudia Sheinbaum como vieron muchos Demócratas a Hillary Clinton en EU: Como una candidata de menor calidad entre las opciones disponibles. En EU el candidato que muchos Demócratas vieron como mejor opción era Bernie Sanders. Y en México el candidato que muchos izquiedistas ven como mejor opción es Marcelo Ebrard.
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