Todo apunta a que en pocos años los sitios de noticias en internet serán irrelevantes. O por lo menos, no generarán ganancias monetarias.
Lo digo porque, Verizon, el actual dueño del Huffington Post, el que fue durante muchos años el modelo a seguir para los sitios de noticias "alternativos", está buscando venderlo.
La historia es esta:
El Huffington Post fue creado en 2005 por la ex-candidata a gobernadora de California, Arianna Huffington, quien lo usaba para ventilar sus opiniones de política en Estados Unidos.
En 2011, America Online compró el sitio por 315 millones de dólares. En ese entonces estaban de moda los blogs de noticias y el Huffington Post era el modelo a seguir.
En 2015, la empresa de telefonía celuar y proveedora de internet Verizon, compró a America Online, por ende convirtiéndose en el dueño del Huffington Post.
Pero en los últimos años el Huffignton Post ha tenido problemas para generar ingreso, lo cual ha causado el cierre de ediciones internacionales del sitio y reducciones en sus operaciones.
Finalmente, el pasado 18 de octubre el diario Financial Times dio a concer que Verizon estaba buscando un comprador para el Huffington Post.
Pero la clave para entender esto es la siguiente: La venta del Huffington Post es parte de una estrategia de negocios más grande de Verizon para distanciarse del negocio de los medios digitales. Previo a esto, por ejemplo, Verizon ya había vendido el sitio Tumblr, el cual compró en 2013 por $1.1 mil millones de dólares y vendió por cacahuates relativamente poco tiempo después.
¿Por qué compró medios digitales Verizon? Porque a principios de la década de los 2010s, todo el mundo pensaba que los medios digitales iban a ser un negociazo.
Pero no fue así.
¿Cuál es el problema con los medios digitales? Que no generan ganancias. La publicidad en internet se va principalmente para Google y Facebook, los cuales tienen mucho más alcance que cualquier medio digital.
Yo le agregaría otro problema que nadie quiere ver. El público de internet no necesita de un montón de sitios de internet que dicen lo mismo. Por lo general, el público en internet consume su información de dos fuentes:
1. UN sólo sitio de internet donde obtiene noticias varias.
2. Contenido generado por redes sociales. De hecho, hasta los medios terminan reportando lo que pasa en redes sociales, pero lo presentan cuando ya todo el mundo se había enterado.
El resultado es un públiclo altamente fragmentado que puede ignorar a todos los medios que repiten lo mismo.
"Ah, entonces el último sitio de noticias que quede cuando truenen los demás es el que va a sobrevivir," pensarán algunos. Pero no es así.
No es así porque al final el público no se fija en el sitio, sino en el contenido. Y el contenido puede ser generado por cualquiera. Vaya, nisiquiera tiene que estar en un sitio de internet. Puede estar en un hilo de Twitter, o en un post de Facebook. Hasta en un mensaje de Whatsapp.
Y si los sitios de noticias ya no son indispensables, nisiquiera el último que sobreviva estará en el mercado mucho tiempo. Simple y sencillamente no hay razón para consumirlo siendo que se puede obtener información de otros lados.
Ah, y un último detalle para México: Las redes sociales son gratuitas en los planes de Telcel. Los sitios de internet no. Eso quiere decir que existe un incentivo económico para NO consumir sitios de noticias; cuesta dinero hacerlo. Particularmente si tienen un montón de banners. Se gasta uno los megas de su paquete. Pero si uno sólo consume redes, el gasto es mínimo o nulo.
Por lo cual, en unos años hasta las empresas grandes van a terminar cerrando o vendiendo a muy bajo costo los sitios de noticias actuales al resultar poco o nada rentables. Esto obligará a los sitios de internet a desaparecer, ya que su intención era hacer un montón de dinero.
Pero OJO: no desaparecerán los sitios de información independientes que se hagan de verdad para informar, no para hacer dinero.
Porque alguien escribiendo un blog sin buscar dinero siempre va a hacer labor informativa. Esa persona puede subsidiar esa labor informativa con otro trabajo u otra actividad económica sin recibir un sólo centavo de publicidad.
Ahí es donde veremos el verdadero periodismo; cuando finalmente deje de ser negocio y se convierta en lo que debería ser: una actividad de servicio al público que se hace por compromiso, no por interés.
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