Ante la presión de la opinión pública por el pasmo con el que respondió a los desmanes de anarquistas, finalmente Claudia Sheinbaum envió a policías a vigilar la marcha feminista del 27 de septiembre.
Pero no fue suficiente. De todos modos hubo desmanes. Además, las feministas rociaron con gasolina a algunas policías y prendieron fuego. Nadie salió herido, pero sí quemaron la puerta de la Cámara de Comercio.
Siendo el caso, no queda de otra más que exigirle a la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México que para garantizar que no haya desmanes en la marcha del 2 de Octubre envíe a policías con ESCUDOS para repeler agresiones.
Además, la policía de la Ciudad de México debe llevar cámaras y grabar a todos los que hagan desmanes para poder detenerlos en flagrancia y levantar cargos si agreden a la policía.
Porque una cosa es ser tolerante ante la protesta, y otra ser tarugo y no darse cuenta de que a los "anarquistas" que hacen desmanes los envía el PRIAN desde Edomex, Guerrero y otros estados para hacer golpeteo. Si Claudia Sheinbaum quiere ponerle fin al golpeteo, tendrá que hacer detenciones y exhibirlos públicamente.
Eso no es represión: eso es exhibir a los que han estado tratando de hacer guerra sucia contra los manifestantes de verdad desde hace más de 50 años.
De lo contrario, el golpeteo contra Claudia Sheinbaum continuará durante 6 años y su aprobación ciudadana seguirá en caída libre.
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