Rafael Barajas "El Fisgón" ha insistido en que viene una super-mega-requeterecontra-utanomames-biencabrona guerra sucia contra Andrés Manuel López Obrador.
A lo cual respondo: ¿Y?
Ya vimos esa guerra sucia durante casi 16 años. Desde los videoescándalos de Carlos Ahumada hasta los intentos pueriles por hacer guerra sucia de merolicos del PRIAN que alegan que AMLO es como Hitler(falso; los simpatizantes nazis son los fundadores del PAN), o que van a venir doctores cubanos que estaban en Brasil a México a indoctrinar gente (falso también, lo desmintió el propio AMLO), y jaladas varias.
Pero de todos modos ganó la presidencia Andrés Manuel López Obrador con 53% del voto. Por la sencilla razón de que la gente ya está vacunada contra la guerra sucia.
Entonces ¿de qué está hablando El Fisgón cuando menciona esa archi-requete-recontra-putanomanches-super-ultra-perrísima guerra que le van a hacer a AMLO?
Supongo que se refiere a las mamadas que han estado diciendo los panistas, Claudio X González, el CCE, etc. Nadamás que hay dos detalles que El Fis omite mencionar:
1. Nadie está pelando las mamadas del PAN y la derecha PRIAnista. Tan es así que fue MENOS gente a la segunda marcha fifí.
2. Las babosadas que están diciendo los PRIANistas contra AMLO son claramente para consumo interno. Lo que buscan es evitar que se les vayan más votantes ahora que habrá elecciones estatales en Baja California, uno de los últimos bastiones que le quedaban al PAN, pero donde ahora tuvo más votos AMLO.
El Fis es una persona muy inteligente. Muy acelerado, pero muy inteligente. Resulta la verdad difícil de creer que de verdad creyera que AMLO no iba a ganar. Porque él mismo lo confesó luego de las elecciones; él pensó que AMLO no iba a ganar y que le iban a hacer un fraude enorme.
Pero eso es dejarse llevar por la conspiranoia, no por el sentido común ni por los números. Y lo que la izquierda necesita ahora que está en el poder es precisamente dejarse de conspiranoias y empezar a actuar en base a números y datos. La izquierda tiene que tener objetividad y autocrítica.
Lamentablemente el Fis no ha querido tener esa objetividad y esa autocrítica como izquierda en el poder. Hace unos días publicó un cartón que básicamente le solapa a Andrés Manuel López Obrador su negativa a investigar a los ex presidentes. El cartón básicamente alega que no hay evidencias contra Salinas.
¿Pues qué no las investigaciones se hacen precisamente para encontrar evidencia?
En vez de tener autocrítica y objetividad, el Fis decidió seguir la línea de Palacio Nacional. Que si quieren no la da AMLO directo ni se entera de que alguien la dio, pero me consta que la dan sus achichincles. Vaya, a mi me trataron de dar línea en 2012 para que dejara de criticar el error que cometieron al contratar a Oscar Mondragón (quien también buscaba clientes del PRI y del PAN) y me negué rotundamente a callarme.
En estas elecciones, Mondragón se la pasó atacando a AMLO.
¿Quién tuvo razón?
Y la verdad, es muy decepcionante ver que el Fis, quien durante décadas fue crítico del poder, hoy sea vocero del poder.
Porque sea de izquierda o sea de derecha, el poder es el poder. Y se le debe cuestionar. Eso no cambia. El ciudadano siempre debe cuestionar al poder para que haga bien su trabajo.
Porque si no cuestionamos al poder, AMLO nunca corregirá sus errores. Y si no corrige sus errores, entonces sí en 2021, cuando haga consulta para revocación de mandato la gente lo puede quitar del poder. Y si eso pasa le tendremos que decir adiós a la posibilidad de que la izquierda sea gobierno federal.
Si el Fis de verdad quiere ayudarle a AMLO, en vez de estar con conspiranoias de ultra-requete-culerísimas guerras contra AMLO, mejor que sea objetivo y crítico del poder para que AMLO y Morena corrija los errores que cometen. Porque si somos nosotros quienes señalamos los errores, la derecha no podrá hacerlo y seguirán empequeñecidos en un remedo de oposición que sólo sabe difundir mentiras que sea caen de inmediato.
Si somos nosotros lo que señalamos los errores de la izquierda en el poder, y la izquierda corrige a tiempo, la izquierda se ganará el respeto de propios y extraños. Y eso será lo que garantice que la izquierda sea gobierno 6 años y que vuelva a ganar las elecciones 6 años después.
No lo digo por mamón ni por joder, Fis. Lo digo con mucha seriedad y esperando que tengas la autocrítica suficiente para darte cuenta de que te estás equivocando. Pero que si corriges a tiempo, y te conviertes en vigilante del poder, en vez de vocero, para que la izquierda en el poder pueda corregir a tiempo sus errores, la derecha neoliberal nunca más regresará a abusar de México y de los mexicanos.
PD: No soy ingénuo. Se perfectamente que esta columna garantiza el enojo del Fis, de los demás moneros, y de muchos fans de Morena a pesar de que todos saben que estoy diciendo la verdad. Pero alguien lo tiene que decir. El pretexto que no puede tener la izquierda para justificar sus errores es "es que no sabía." Si la izquierda pudo llegar al poder, ahora tiene que cuidarlo. Y la única manera en la que puede cuidar el poder es criticando sus errores y corrigiéndolos. No hay de otra.
PD2: Inclusive como marketing político funciona mejor reconocer un error y corregirlo que pretender que no se están cometiendo errores. Esto se ha analizado varias veces en el comportamiento de empresas que han cometido errores que les han costado perder público y ventas. Las empresas que corrigen a tiempo recuperan clientes y ventas. Las que no, nunca logran recuperarse. Lo mismo aplica a los gobiernos. En vez de leer conspiranoias, tal vez el Fis y todos los fans de Morena deberían leer un poco más sobre marketing.
PD3: ¿Qué hacer con los mentirosos y merolicos del PRIAN? Desmentirlos, desde luego. Pero tampoco hay que darles una importancia que no tienen. Están empequeñecidos y nadie los toma en serio. Sólo los tomarán en serio cuando AMLO y Morena cometan errores y no corrijan. Precisamente por eso es que insisto tanto en ser autocríticos, objetivos, y en no estarle solpando NADA a AMLO ni a Morena. La gente prefiere al que muestra humildad al reconocer un error a tiempo y corregir a tiempo, que al que se muestra arrogante y no admite un sólo error a pesar de que el error es absolutamente demostrable.
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