jueves, 26 de octubre de 2017

Renuncia de Emilio Azcárraga Jean a ser CEO de Televisa es una farsa

Por Victor Hernández

De acuerdo con el Wall Street Journal, Emilio Azcárraga Jean renunció a seguir siendo el CEO de Televisa.

En realidad la supuesta salida de Azcárraga Jean es una farsa para dar la apariencia de que Televisa ahora sí ya va a cambiar y ver si así frenan la hemorragia de rating que han tanido gracias a que los televidentes se están mudando a Netflix y a YouTube. Porque la realidad es que en Televisa todo va a seguir igual. Mire usted:

Para empezar, los que quedan de co-presidentes de Televisa son los mismos dos sicofantes de Azcárraga que ya se encargaban de regentearle la operación de la empresa: Bernardo Gómez y Alfonso Angoitia. Eso garantiza que Televisa seguirá igual que antes, y evidencia que la "renuncia" de Azcárraga es en realidad un vil cuanto para que la gente crea que Televisa ya no es la misma mierda que siempre ha sido y seguirá siendo.

En segundo lugar, Emilio Azcárraga Jean seguirá de presidente del consejo administrativo de Televisa. O sea que Azcárraga seguirá mandando pero tras bambalinas. Insisto: No hay cambios reales. Televisa sigue igual, pero con la farsa de que Azcárraga ya no es el CEO.

Esta farsa, no obstante, muestra con mucha claridad la crisis en la que está sumida Televisa gracias a que insiste en venderle mierda al público. Y es que de acuerdo con el Wall Street Journal, Televisa tiene los siguientes problemas:

1. En 10 Televisa años perdió la mitad de sus ventas de publicidad y casi la mitad de sus ganancias.

2. En los últimos 6 meses los ingresos de Televisa cayeron 8.9%.

3. Las acciones de Televisa crecieron sólo 1%, cuando el resto de la bolsa mexicana de valores tuvo un incremento promedio de 13%.

4. 54% de las ganancias de Televisa vienen de TV de paga. Eso quiere decir que cada vez menos gente los ve en TV abierta, mientras que en TV de paga cada vez menos gente ve su programación.

Ahora voy a citar textual del Wall Street Journal traducido al español:

El crecimiento de internet ha expuesto debilidad en el modelo de negocios tradicional de Televisa. Por décadas, el producto principal de la empresa han sido las telenovelas, producidas rápido y barato. Varias de sus telenovelas estilo Cenicienta de pobreza a riqueza eran super-hits en mercados tan lejanos como Rusia y las Filipinas, ayudando a convertir a la televisora en un titán regional a finales de los 1970s.

Pero servicios de suscripción como Netflix permitieron que muchos mexicanos jóvenes tuvieran una ventana a un nuevo de contenido de otros países, mucho del cual en español.

TRADUCCIÓN: El público mexicano ya no le tiene que aguantar su mierda a Televisa y por eso están perdiendo rating.

Vaya, según el WSJ, hace tres años los problemas de rating para Televisa se empezaron a notar en Estados Unidos, en donde los contenidos de Televisa le causaron bajas en rating a Univisión.

De hecho, dice el WSJ, el rival de Univisión en EU, Telemundo, no tiene los problemas que sí tienen los contenidos de Televisa. ¿La razón? Porque Telemundo ha actualizado los contenidos de su programación y Televisa no. De hecho, la salida de José Bastón de Televisa fue por presiones de Univisión, ya que Bastón era el encargado de los contenidos que le están causando pérdidas de dinero a la televisora.

Pero en vez de cambiar sus contenidos, Televisa creyó que iba a tener más audiencia simplemente comprando sitios de internet que son básicamente la misma mierda que Televisa... pero internet. Obviamnte el público los mandó al carajo y ahora Televisa tiene que hacer esta farsa de la "renuncia" de Azcárraga para ver si así logran recuperar rating.

Los lambiscones de Televisa, desde luego, dirán que no pasa nada y que van de pelos. Pero si fuera el caso, Azcárraga no hubiera "renunciado" a ser presidente de Televisa.

¿Qué va a pasar con Televisa entonces? Pues que seguirá perdiendo audiencias gracias al acceso a internet. Recordemos: Carlos Slim da acceso a contenidos por internet gratis con ciertos planes de Telcel. Lo cual significa que cada vez más gente de bajos ingresos podrá ver televisión por internet. Y mientras más gente de menores recursos vea internet, Televisa perderá más audiencia.

¿Cuánto va a tardar esto en ocurrir? Ya está ocurriendo. En menos de 10 años la audiencia de Televisa se reducirá a la mitad de lo que tienen ahora. Porque hay otro detalle que Televisa no ha querido entender: Los jóvenes que hoy ven YouTube serán los adultos que mañana no tendrán interés en prender la televisión más que para ver YouTube o Netflix.

Y Televisa se pudrirá, ya que sólo los públicos más viejos verán sus porquerías. Nadamás que hay un detalle: Eso garatntiza que sus públicos durarán relativamente poco tiempo, y no serán reemplazados por públicos jóvenes.

Así que por mucha farsa que hagan Televisa y Emilio Azcárraga, les seguirá esperando el basurero de la historia.

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