miércoles, 18 de octubre de 2017

Cómo asesoré a una campaña electoral en EU

Por Victor Hernández

Recientemente asesoré a una campaña electoral en Estados Unidos. No voy a decir a quién, o en qué parte de EU o para qué cargo. Lo único que voy a decir es que en este momento todos los que están registrados como precandidatos en EU están buscando ganar la elección interna de su partido, lo cual ocurrirá entre Marzo y Junio de 2018 para luego, si ganan, continuar con la campaña contra otro partido.

En este caso en particular me pidieron asesoría para redes sociales y campaña por email. Sin problema. Lo hice en unas horas y si tener que gastar extra en servicios de email masivo.

(Es lo bueno de ser chingón y calzar grande como yo, pues.)

Pero lo que realmente me llamó la atención de la manera en la que se hacen las campañas en EU fue el hecho de que ser precandidato de un partido político en EU es muy fácil. Virtualmente cualquier ciudadano puede serlo sin tener que aguantar grillas internas de los partidos para que les nieguen una candidatura. El que quiere ser candidato simplemente va a registrarse ante la autoridad electoral local y nadie se lo puede impedir.

El problema es que aunque se registren mil, sólo los que hagan campaña van lograr llamar la atención lo suficiente como para que voten por ellos.

Ahí el problema es que para hacer campaña tienen que gastar dinero. Peor: no recibirán dinero público para hacer su campaña, por lo cual, lamentablemente, usualmente los canidadatos que recaudan más donativos para sus campañas son los que logran ganar.

Y eso nos lleva al problema fundamental con las campañas políticas en EU: se preocupan más y gastan más tiempo y recursos en recaudar fondos para sus campañas que en hacer propuestas.

Me consta. Para poder asesorar mejor a esta campaña ví lo que estaban haciendo los contrincantes en internet. Ni uno sólo tenía propuestas específicas en sus sitios de internet o en sus cuentas de redes sociales. Presumían tener experiencia en X o Y, o estar a favor de X tema en genérico, pero ninguno -ni en la campaña que asesoré- tenían una propuesta política en específico.

Como resultado, NADIE se interesa en las internas de EU -o muy poca gente- porque no hay nada en qué interesarse. Como no hay propuestas, no hay razón para votar aparte de "es que no es del otro partido."

Así que llegó el punto en el que de plano les dije a los de la campaña que si de verdad quieren ganar la elección tenían que hacer propuestas específicas. Pero como no los vi muy movidos en la cuestión de las propuestas, les diseñé una propuesta de campaña que llamara la atención en la interna y le diera más tracción al candidato.

Se quedaron con el ojo cuadrado. Al parecer nunca se les ocurrió que necesitaban tener propuestas políticas para poder ganar la elección. Y se pusieron a trabajar de inmediato en la sugerencia que les hice.

Ahora bien; el contraste con México es brutal. En México no es posible ser candidato de un partido si no quiere la cúpula del partido. Y ser independiente está muy difícil. Pero una vez teniendo la candidatura hay dinero público para hacer campaña, con lo cual las campañas en México se enfocan un poco propuestas -por buenas o malas que éstas puedan ser- y mucho en hacer spots, pero no en andar pidiendo dinero para hacer campaña.

¿A qué conclusión llego de esto? Que México necesita ser más como Estados Unidos para poder postular candidatos y Estados Unidos necesita ser más como México para financiar sus campañas. Cero dinero privado. Sólo dinero público -en una proporción razonable- y enfocarse sólo en propuestas.

Veremos en qué acaba la campaña a la que asesoré. Si hacen bien las cosas, van a ganar. Si no, pues no.

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