Reforma publicó ayer que el helicóptero que se usó para tirar volantes para infundir miedo y tratar de impedir que la gente vote en Texcoco, donde fue alcaldesa Delfina Gómez, era usado por la empresa DCO Aviation Solutions, la cual recibió contratos millonarios de la administración del ex gobernador priista de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa.
De hecho, la empresa es investigada por el gobierno de Veracruz por recibir al menos 50 millones de pesos por la renta de aeronaves para el traslado de ex funcionarios de Duarte y por sus nexos con empresas fantasma. De pilón, la SSP de Texcoco descubrió que Javier Duarte es socio de la empresa.
¿O sea que Javier Duarte sigue operando para el PRI, pero ahora en el Estado de México a favor de Alfredo del Mazo?
De ser el caso, entonces el gobierno federal priista de Enrique Peña Nieto sabe perfectamente dónde está Duarte pero no lo captura para que pueda seguir disfrutando de impunidad.
Claro, DCO Aviation Solutions, señala Reforma, dice que "celebró un contrato de comodato con Corporativo Pulsar Mexicana y que ésta arrendó el helicóptero a un tercero, pero no se lo notificó."
Ajá. Entonces la empresa de Duarte le "prestó" el helicópero a otra empresa que luego la rentó a un tercero. Misma explicación rebuscada que dio el PRI con las tarjetas de Monex.
Así que ssas se pegan abajo.
El caso es que ahor se sabe que la guerra sucia contra Delfina Gómez vino del PRI. Y con la mano de Javier Duarte embarrada en el asunto.
Si Delfina quiere pegarle a Del Mazo, ahí tiene material de sobra para hacerlo. Nadamás es cosa de que se le quite un poco lo pazguata y deje de pensar y actuar como si su campaña dependiera de AMLO.
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