El ex candidato presidencial priista, Enrique Peña Nieto, pretendió verle la cara a los mexicanos omitiendo datos, diciendo mentiras y de plano burlándose con cinismos.
En primer lugar, Peña omitió comparar las cifras del crimen en 2016 con las de 2015. Si lo hubiera hecho, hubiera tenido que admitir que el homicidio aumentó 17% en apenas 6 meses.
Pero en vez de admitir que aumentó el delito, el informe de Peña compara datos de 2015 con datos de 2012 para alegar que hubo una disminución del crimen.
Hombre, pues entonces también hay una disminución de la violencia si lo comparamos con 1913. Mentiroso.
Otra mentira de Peña: Cuando le preguntaron por internet en su "diálogo" prefabricado con estudiantes si admite que plagí su tesis, dijo con todo el desparpajo del mundo que no plagió nada. Dijo:
"Tengo muy presente los estudios que realició, como investigué lo que formulé en mi tesis. Nadie me puede decir que plagié mi tesis, que pude haber mal citado o bien citado algunos de los autores que consulté, es probable que sí.
"Tendría que aceptar que fue un error metodológico, pero no con el ánimo, de ninguna manera, de haber querido hacer mías las ideas de alguien más, pude haber cometido algún error metodológico."
Miente. La propia Universidad Panamericana admitió que Peña Nieto sí uso ideas ajenas sin citar, y que no se puede proceder en su contra porque es "hecho consumado" y no hay reglamento para ex alumnos. Es decir, si Peña fuera estudiante hoy en día, le revocarían la tesis por plagio.
Así que decir que no plagió es una mentira y un cinismo deleznable por parte de Peña.
Hablando de cinismos, vean estas joyas del informe de Peña:
1. Que la PGR sólo investiga 27 casos de corrupción en el gobierno federal este año. Ajá. Sólo hay 27 corruptos en el país. Ah, y eso de 79 expedientes que hubo de 2015 a 2016. O sea que nadamás hubo quejas contra 79 funcionarios y sólo se investiga a 27. Cínico. Por cierto: a ninguno de los 27 se les ha castigado. Ni dice el informe a quién investigaron ni en qué dependencia. Puro maquillaje. Desde luego ni a la Casa Blanca, ni al depa de Miami, ni a la casa de Malinalco las tocaron.
2. Se dejaron de construir hospitales con Peña Nieto. De 2013 a 2015 se disminuyó por 50% la construcción de hospitales. ¿Y así pretendían construir el tren de Querétaron con jugosa mochada para Higa? Priistas cínicos.
3. De pilón, Peña Nieto le recortó 89.3% el gasto a la refinación de gasolinas y producción de gas natural. Como resultado, ahora se importan más gasolinas más contaminantes, y a usted le suben los impuestos con gasolinazos.
OJO: Con el PAN estaríamos igual de mal. Es por eso que en 2018, para que ya no sigua el PRIAN saqueando al país, lo mejor es votar por la izquierda.
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