El Wall Street Journal publicó el jueves pasado que de acuerdo con datos del SAT, el gobierno federal priista de Enrique Peña Nieto investiga al gobernador panista de Sonora, Guillermo Padrés, por haber recibido supuestamente 3.3 millones de dólares del empresario Mario Aguirre, cuya empresa ha recibido 20 millones de dólares para proveer de uniformes a escuelas públicas de Sonora.
Ayer, el vocero del gobierno de Sonora, Jorge Morales, negó en entrevista radiofónica la versión publicada por el WSJ y dijo que se enmarca "en el contexto del inicio de las campañas electorales."
Dijo además que el propio reportero del Wall Street Journal quien admitió que fue la Unidad de Investigaciones Especiales de la Secretaría de Hacienda la que filtró la información, lo cual sería ilegal por tratarse de una investigación en proceso.
Y además dijo que personajes ligados al PRI habían amenazado previamente sobre una fuerte publicación del WSJ, por lo cual ya se esperaban el balconeo.
¿Es creíble que se esté investigando a Padrés por lo que suena como a un moche? Sí, sí es creible.
¿Puede tener base la investigación? Tal vez. Si por algo se han caracterizado los panistas este sexenio es por los moches.
¿Filtró el gobierno priista la información al WSJ con fines electorales? Por supuesto que sí.
Y es que desde septiembre pasado las encuestas muestran una distancia de apenas 2.2 puntos porcentuales entre el PAN y el PRI para la elección estatal en Sonora, con el PRI en segundo lugar.
Berumen, por ejemplo, le di en septiembre pasado 36.6% al PAN y 34.4% al PRI.
Para enero pasado la situación seguía igual para el PRI. Una nota del 15 de enero de Sipse menciona precisamente que las elecciones en Sonora y Baja California Sur serán difíciles para el PRI.
Para febrero las cosas pintan igual de mal para el PRI. Una encuesta de Buendía y Laredo levantada entre el 16 y 19 de enero le dan una ventaja de 9 puntos al PAN por encima del PRI.
Así que con esos números resulta fráncamente poco creíble que la filtración de la investigación del SAT a Padrés no tenga un propósito electoral.
Si el PRI de verdad quiere que la opinión pública no piense que se trata de un ardid electoral, pues entonces que responda las siguientes preguntas:
1. ¿Hay una ivestigación como la de Padrés contra algún gobernador del PRI?
2. Si la hay, ¿se la van a filtrar también al Wall Street Journal?
Sencillo como eso. Porque, no nos hagamos, el gobernador priista de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa, tiene propiedades en Estados Unidos y el gobierno priista de Enrique Peña Nieto no le ha investigado nada.
Qué bueno entonces que estpen investigando a Guillermo Padrés por presuntos moches. Pero si no investigan a los gobernadores del PRI, entonces esa investigación queda en mera medida de desesperación electorera por parte del PRI.
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