La nueva sede del Senado de la República costó 13 mil millones de pesos. Fue un despilfarro oneroso y sin sentido.
Bueno, pues ayer, ante el miedito que le dieron las protestas contra la reforma laboral, el PRIAN acordó que si hay protestas, los senadores puedan sesionar o en otros salones de la nueva sede, o en la antigua sede de Xicoténcatl, en el Centro Histórico, o de plano en cualquier otro lugar del DF donde haya espacio y condiciones para sesionar.
Es decir, los 13 millones de pesos gastados en el nuevo Senado al final fueron injustificados, ya que los Senadores pueden sesionar DONDE SEA.
Peor: con esto además de dejar claro que la nueva sede del Senado fue un despilfarro, el PRIAN deja claro el enorme temor que le tiene a la gente, que son los que finalmente pagaron por la nueva sede.
PD: Alejandra Barrales, senadora por el PRD del DF, propuso que haya "enlace permanente" con los líderes sindicales para evitar protestas. ¿Qué no se enteró Barrales de que los que protestaron eran estudiantes?
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